{"id":939235,"date":"2023-12-23T16:21:01","date_gmt":"2023-12-23T16:21:01","guid":{"rendered":"https:\/\/magazineoffice.com\/estas-son-las-historias-de-ciberseguridad-que-nos-envidiaban-en-2023\/"},"modified":"2023-12-23T16:21:03","modified_gmt":"2023-12-23T16:21:03","slug":"estas-son-las-historias-de-ciberseguridad-que-nos-envidiaban-en-2023","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/magazineoffice.com\/estas-son-las-historias-de-ciberseguridad-que-nos-envidiaban-en-2023\/","title":{"rendered":"Estas son las historias de ciberseguridad que nos envidiaban en 2023"},"content":{"rendered":"
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En 2018<\/span>, mi ex colega de VICE Placa base Joseph Cox y yo comenzamos a publicar una lista de las mejores historias de ciberseguridad que se publicaron en otros lugares. No era s\u00f3lo una manera de quitarnos el sombrero ante nuestros amigos competidores; al se\u00f1alar las historias de otras publicaciones, est\u00e1bamos brindando a nuestros lectores una imagen m\u00e1s completa de lo que hab\u00eda sucedido en el mundo de la ciberseguridad, la privacidad y la vigilancia en el a\u00f1o que acababa de terminar.<\/p>\n Nuestra inspiraci\u00f3n original fue la Lista de celos de Bloomberg Businessweek, un compendio continuo de las mejores historias publicadas en otros medios seleccionadas por reporteros y editores de Bloomberg.<\/p>\n Ahora que tanto Cox como yo dejamos la placa base, en TechCrunch estamos retomando la lista de celos cibern\u00e9ticos para enumerar una vez m\u00e1s las mejores historias de ciberseguridad del a\u00f1o, y aquellas de las que est\u00e1bamos m\u00e1s celosos. \u2014 Lorenzo Franceschi-Bicchierai.<\/em><\/p>\n Si estuvo en Internet en octubre de 2016 y vivi\u00f3 en la costa este de EE. UU., probablemente recuerde ese d\u00eda en que los principales sitios web como Twitter, Spotify, Netflix, PayPal, Slack y cientos m\u00e1s dejaron de funcionar durante un par de horas. Al final result\u00f3 que, ese fue el trabajo de tres j\u00f3venes piratas inform\u00e1ticos emprendedores, que hab\u00edan creado una de las herramientas distribuidas de denegaci\u00f3n de servicio m\u00e1s efectivas jam\u00e1s creadas.<\/p>\n En este extenso art\u00edculo, Andy Greenberg perfila a los tres j\u00f3venes hackers y cuenta la historia no contada de sus vidas, desde adolescentes nerds inform\u00e1ticos hasta consumados ciberdelincuentes y, al final, hasta profesionales reformados de la ciberseguridad. Si\u00e9ntate en una silla c\u00f3moda y sum\u00e9rgete en esta lectura obligada.<\/p>\n En septiembre, una alianza imp\u00eda de ciberdelincuentes rusos y adolescentes occidentales con excepcionales habilidades de ingenier\u00eda social supuestamente hacke\u00f3 y derrib\u00f3 los casinos de MGM en Las Vegas, causando una perturbaci\u00f3n generalizada. Este fue uno de los ciberataques m\u00e1s comentados del a\u00f1o y varias publicaciones se mantuvieron en la historia. Jason Koebler, ex editor en jefe de VICE Motherboard y ahora uno de los cofundadores del medio de comunicaci\u00f3n 404 Media, propiedad de los trabajadores, tuvo la inteligente idea de volar a Las Vegas y ver el caos con sus propios ojos. El resultado de su viaje fue una pieza que mostraba cu\u00e1n grave fue el golpe para MGM, lo que result\u00f3 en una \u201cpesadilla\u201d para los trabajadores de los casinos, como dijo Koebler.<\/p>\n La corresponsal de ciberseguridad de NPR, Jenna McLaughlin, inform\u00f3 desde Kiev y document\u00f3 una serie de excelentes noticias e historias en audio sobre la vida en Ucrania en tiempos de guerra, escritas por quienes defendieron el pa\u00eds despu\u00e9s de la invasi\u00f3n rusa. La guerra cibern\u00e9tica ha desempe\u00f1ado un papel importante en la guerra, y los ciberataques afectaron al sector energ\u00e9tico de Ucrania y sus operaciones militares. Los despachos de McLaughlin abarcaron reuniones con los principales ciberdefensores e informes sobre las operaciones defensivas (y ofensivas) de Ucrania contra sus agresores rusos, combinados con aspectos destacados de la vida cotidiana normal de Ucrania, incluido el f\u00fatbol, \u200b\u200bpor supuesto.<\/p>\n En un sorprendente cambio radical, el fabricante de productos electr\u00f3nicos Anker admiti\u00f3 que sus c\u00e1maras supuestamente siempre encriptadas no siempre lo estaban. En resumen, un investigador de seguridad encontr\u00f3 un error que mostraba que era posible acceder a transmisiones no cifradas de v\u00eddeos de clientes, a pesar de las afirmaciones de Anker de que sus c\u00e1maras Eufy estaban cifradas de extremo a extremo. The Verge verific\u00f3 y reprodujo los hallazgos del investigador de seguridad y Anker finalmente admiti\u00f3 que sus c\u00e1maras no estaban cifradas de extremo a extremo como afirmaba y, de hecho, hab\u00edan producido transmisiones no cifradas. Me quito el sombrero ante The Verge por sus impresionantes y tenaces informes que llegan al fondo de las tergiversaciones de Anker y su fallido intento de encubrirlas.<\/p>\n En 2020, piratas inform\u00e1ticos del gobierno ruso introdujeron c\u00f3digo malicioso en la cadena de suministro de software fabricado por SolarWinds, una empresa de tecnolog\u00eda cuyos clientes van desde corporaciones gigantes hasta agencias del gobierno federal. El hack fue sigiloso e incre\u00edblemente efectivo, dando a los rusos la oportunidad de robar secretos de su pa\u00eds rival. Reportero veterano de ciberseguridad Kim Zetter<\/a> Habl\u00f3 con las personas que ayudaron a investigar el incidente y reconstruyeron el ataque sigiloso casi paso a paso en una investigaci\u00f3n incre\u00edblemente detallada y profunda. Zetter tambi\u00e9n public\u00f3 una pr\u00e1ctica y completa cronolog\u00eda de eventos en su Substack, a la que vale la pena suscribirse si a\u00fan no lo ha hecho.<\/p>\n
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