Se pidi\u00f3 a los invitados que guardaran silencio sobre el motivo de su visita. En vano. Es el secreto peor guardado en estos momentos. Los coches oficiales se suceden frente al Museo de Arte de Tel Aviv. Son las cuatro de la tarde. Debemos darnos prisa antes del comienzo del Shabat. Cuando el mandato brit\u00e1nico en Palestina estaba a punto de expirar, el viernes 14 de mayo de 1948, varios cientos de personas se reunieron al pie del edificio, conteniendo la respiraci\u00f3n.<\/p>\n En el interior, los rostros son serios. Bajo un intimidante retrato del periodista <\/strong>austro-h\u00fangaro <\/strong>Theodor Herzl, el padre del sionismo pol\u00edtico, David Ben-Gurion (1886-1973), lee la declaraci\u00f3n de independencia del nuevo Estado ante representantes de todos los componentes de la comunidad jud\u00eda.<\/p>\n Sus t\u00e9rminos fueron objeto de feroces negociaciones. Particularmente la referencia a Dios. Demasiado presente para los secularistas, luego eliminado del texto para enfado de los religiosos, y finalmente reintroducido de forma discreta. Tzur Israel<\/em> \u2013 \u201cla roca de Israel\u201d \u2013 es una expresi\u00f3n conveniente porque es ambivalente. Puede entenderse como una referencia al creador en el juda\u00edsmo pero tambi\u00e9n al pueblo jud\u00edo, desde un punto de vista pol\u00edtico. La voz de David Ben-Guri\u00f3n no tiembla. Sin embargo, se emociona al leer la declaraci\u00f3n ante los micr\u00f3fonos.<\/p>\n Es una promesa voluntaria en tiempos muy inciertos, hecha en nombre de los muertos de la Sho\u00e1, en respuesta a dos mil a\u00f1os de exilio y para las generaciones venideras. El texto proclama \u201cla creaci\u00f3n de un estado jud\u00edo en la tierra de Israel\u201d.<\/em> Basado en el \u201clibertad, justicia y paz\u201d<\/em>dedica el desarrollo del pa\u00eds \u201cen beneficio de todos sus habitantes\u201d<\/em> y asegura \u201cla m\u00e1s completa igualdad social y pol\u00edtica\u201d<\/em>, esto \u201csin distinci\u00f3n de religi\u00f3n, raza o sexo\u201d<\/em>. Igualdad, ausencia de discriminaci\u00f3n alguna: las ra\u00edces socialistas del Estado aparecen claramente.<\/p>\n Aqu\u00ed estamos setenta a\u00f1os despu\u00e9s. Israel es un adulto, lo que no impide las crisis existenciales. Son las 4 de la madrugada del 19 de julio de 2018 y las luces a\u00fan no se han apagado en la Knesset, el Parlamento israel\u00ed. Es hora de una selfie. Estamos lejos del blanco y negro que inmortaliz\u00f3 a David Ben-Gurion. Esta foto re\u00fane a funcionarios electos del Likud, el principal partido de derecha, en torno a su l\u00edder, el primer ministro Benjam\u00edn Netanyahu. \u00bfQu\u00e9 celebran as\u00ed? La adopci\u00f3n de un texto hist\u00f3rico y controvertido, por 62 votos contra 55, que define a Israel como \u201cel hogar nacional del pueblo jud\u00edo\u201d<\/em>. Una expresi\u00f3n com\u00fan. El contexto no lo es.<\/p>\n
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