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Este reciente lanzamiento de pseudo-documental est\u00e1 m\u00e1s en la l\u00ednea de \u00abLake Mungo\u00bb en la forma en que construye una historia sobre el dolor en torno a la existencia potencial de otras dimensiones. Despu\u00e9s de la misteriosa desaparici\u00f3n de su prometida, Wayne Richie (Jeremy Childs) contacta a un equipo de documentalistas para que lo ayuden a encontrarla. Cuando digo extra\u00f1o, quiero decir que aparentemente desapareci\u00f3 de la faz de la tierra. Estaban caminando por Howard’s Mill cuando un minuto ella estaba all\u00ed y al siguiente no. Wayne no entiende y quiere encontrar respuestas. A medida que el equipo profundiza en la historia de la propiedad, se dan cuenta de que ha sido el lugar de varias desapariciones durante 40 a\u00f1os. <\/p>\n
Esta pel\u00edcula sigue m\u00e1s de cerca el formato documental t\u00edpico, ya que no hay \u00abmetraje encontrado\u00bb en su n\u00facleo. En cambio, es un equipo de investigadores que intentan encontrar respuestas. No hay un monstruo o un demonio persiguiendo a nuestros personajes, pero una sensaci\u00f3n de pavor se cierne sobre la pel\u00edcula. Es opresivo, triste y una prueba de que el subg\u00e9nero todav\u00eda est\u00e1 vivo y bien.<\/p>\n<\/p><\/div>\n