Supuestamente, todas las películas y programas de televisión de DC lanzados durante la última década (incluso aquellas en las que trabajó Gunn) no serán canónicos en el futuro. Dicho esto, varios actores del Universo Extendido de DC se quedarán y Gunn ha ofrecido algunos mensajes contradictorios:
«Algunos actores interpretarán personajes que han interpretado en otras historias y algunos puntos de la trama pueden ser consistentes con los puntos de la trama de docenas de películas, programas y proyectos animados que han surgido de DC en el pasado».
Me resulta difícil creer que Gunn destrozaría sus propios proyectos, por lo que es mejor verlos como el «Canon de Schrodinger»: cuentan hasta que dejan de contar.
En ese sentido, se recomienda ver «The Suicide Squad» de Gunn y la serie de televisión derivada «Peacemaker». Tienen premisas superpuestas con «Creature Commandos» (Amanda Waller reúne un excéntrico equipo de operaciones encubiertas) y ofrecen una idea del tipo de tono, narración y dinámica de personajes que uno puede esperar cuando Gunn escribe el Universo DC.
¿Si uno quiere repasar los cómics de «Creature Commandos»? Están las historias originales de la década de 1980 en «Weird War Tales», la serie de ocho números «Creature Commandos» de 2000 (de Tim Truman y Scot Eaton) y la serie de 2011 «Frankenstein, Agent of SHADE» (escrita por Jeff Lemire y luego Matt Kindt, dibujado por Alberto Ponticelli), una reinvención del equipo del que parecen estar sacando los «Creature Commandos» de Gunn.
Si uno quiere probar los Creature Commandos en animación, también puede ver los tres cortos, «DC Nation: Creature Commandos». Estos deben más a los cómics originales, desde la alineación del equipo hasta el escenario de la Segunda Guerra Mundial, que la serie de Gunn.