Como de costumbre, el régimen está reprimiendo las protestas de los valientes hombres y mujeres. Quieren que el mundo sepa sobre su destino. Estados Unidos y la UE pueden ayudar, y deberían hacerlo con urgencia.
Cuando se cortan las conexiones a Internet en países autoritarios, uno debe temer lo peor. Ese fue el caso en Irán en 2018 y 2019, cuando decenas de miles salieron a las calles contra los aumentos en los precios de los alimentos y la gasolina. Durante el apagón de internet, las fuerzas de seguridad reprimieron las protestas. La brutal represión cobró cientos de vidas y miles de heridos.