Cómo Broadway hizo amigos para toda la vida a James Stewart y Henry Fonda


Fonda y Stewart aparecieron juntos en un puñado de películas durante sus carreras contemporáneas, incluyendo «On Our Merry Way», «How The West Was Won» y «The Cheyenne Social Club». Sin embargo, es interesante comparar sus carreras, incluso cuando no estaban trabajando juntos.

A través de las colaboraciones de Fonda con John Ford y de Stewart con Frank Capra, llegaron a encajar en un arquetipo similar: el hombre All-American decente y con los pies en la tierra que era imposible que no te gustara. Me vienen a la mente los papeles que definieron la carrera de Stewart como el senador Jefferson Smith y George Bailey. Mientras tanto, unas dos décadas antes de que Fonda interpretara el avatar de la buena ciudadanía en «12 Angry Men», interpretó al ideal histórico de la buena ciudadanía, Abraham Lincoln, en «Young Mr. Lincoln».

El público asoció tan fuertemente a los dos como buenos que algunos de sus roles posteriores se basan en subvertir eso. En las colaboraciones de Stewart con Alfred Hitchcock, «Vértigo» en particular, interpreta personajes menos santos. En «Érase una vez en el oeste», Fonda interpreta al forajido asesino Frank; incluso se construye un arco alrededor que revela su rostro como si fuera un giro. Fonda explicó: «Sergio Leone me eligió porque en este momento podía imaginar al público diciendo: ‘¡Dios mío, ese es Henry Fonda!'».

Mientras que la revelación de Fonda en «Érase una vez en el oeste» es como una bofetada en la cara, en «Vértigo», la de Stewart es más lenta e insidiosa. Ver a Scottie abusar de Judy (Kim Novak) es impactante porque no esperas ese tipo de comportamiento de un personaje de Jimmy Stewart.

A pesar de sus diferencias, las similitudes que compartían Stewart y Fonda explican por qué pudieron interpretar personajes tan superpuestos y por qué, al final, su amistad duró 50 años.



Source link-16