Si la última década estuvo dominada por estafadores, 2022 marcó el comienzo de la era del engaño. Menos elegantes, menos artificiales y alarmantemente más desesperados, los tramposos del año se apresuraron a comerse las migajas de cualquier pastel que pudieran encontrar. Algunos hicieron trampa en los deportes, otros en el juego del amor. Todos fueron increíblemente divertidos, ninguno particularmente bien pensado.
La década de 2010 tuvo a Anna Delvey, el Festival Fyre, el escándalo de admisión a la universidad y Theranos, todos esquemas elaborados que les valieron a los intrigantes sus propios relatos en varias plataformas de transmisión. Y aunque ciertamente me divirtieron los asuntos fraudulentos de este año, en realidad no fueron lo suficientemente intrincados como para llevar un arco estacional. Pero el hecho de que no estén en la televisión en un futuro cercano no significa que no fuera entretenido verlos desarrollarse en tiempo real.
No sé si fue el desgaste de la pandemia lo que le quitó la chispa a todos los aspirantes a estafadores del mundo. Tal vez demasiados personajes de alto perfil fueron capturados y ridiculizados, lo que impidió que los jóvenes charlatanes potenciales entraran en la arena. Tal vez la gente simplemente se dio cuenta de que no era necesario involucrar a Ja Rule para ganar dinero con la gente y que deslizar pesas en las barrigas de los peces sería suficiente. Lo que sea que haya causado este cambio sísmico y la degradación intelectual en la industria de los estafadores, ha sido debidamente señalado. Por supuesto, no espero que eso impida que la gente intente estafarnos en 2023. Pero antes de que eso comience, aquí están los trucos más tontos y deliciosos de 2022.