Pero me encanta esto, porque así es como funciona mi cerebro.
Entonces, ¿por qué animación? Bueno, creo que esa es una pregunta válida, y solía ser algo que realmente nos hacíamos incluso antes de dar el primer paso. Estuve en Disney durante 25 años y decíamos: «¿Es esta una película animada o sería mejor como una película de acción en vivo?» Tuvimos que responder a la pregunta: «Sí, esto se presta a la animación», antes de dar el primer paso. Pero hombre, esa línea se está volviendo muy borrosa, porque a medida que la animación se aventura en diferentes géneros y diferentes tonos, se vuelve más difícil entender lo que debería ser la animación.
Al mismo tiempo, la acción en vivo usa mucha animación de maneras que a menudo son invisibles hasta el punto en que dices: «Bueno, ¿qué es ‘Avatar’ otra vez? ¿Qué estoy viendo aquí?» O cualquier película de Marvel usa tanta animación. Y luego tienes una película como «Marcel the Shell» y dices: «Bueno, ¿qué es esto?» En cierto punto, tal vez la pregunta se está volviendo menos importante, porque creo que algunos de los cineastas están haciendo preguntas realmente válidas como: «Si no quieres categorizar esto como animación, ¿cómo nos categorizarías? ¿Qué somos? » Y para mí, es emocionante pensar que solo está abriendo nuevas fronteras.
Entonces, no me quedé demasiado atrapado en esa pregunta desde el principio. Sabíamos que queríamos contar una historia que tuviera estos grandes monstruos, donde la escala iba a ser una gran parte de la experiencia de ver la película, que íbamos a tener cosas muy grandes y seres muy pequeños, y ellos iban a pelear, pero también iban a tener relaciones y conectarse. Eso comenzó a gobernar un poco las decisiones sobre el diseño de producción y la apariencia del mundo.
Sabíamos que no queríamos que fuera demasiado amplia, aunque me encanta «Lluvia de albóndigas», y me encantan las películas realmente cómicas y divertidas que tienen un aspecto y un estilo de actuación más amplios. Sabíamos que eso no iba a ser lo correcto para nosotros porque realmente queríamos sentir la escala, sentir lo que estaba en juego, sentir el peligro y comunicarle a la audiencia: «Este es un mundo donde el peligro es real y la gente puede morir en este mundo.» Eso influyó en el aspecto, pero nunca me disuadió de pensar que esto podría funcionar en la animación.