En términos de apegarse a la cronología del mundo, la forma ideal de ver las películas de «Los juegos del hambre» es comenzar con la precuela, la película más reciente «La balada de los pájaros cantores y las serpientes», antes de continuar con el cuarteto original. Es decir, mire «Songbirds and Snakes», seguida de «Los juegos del hambre», luego «En llamas» y luego «Sinsajo», partes 1 y 2.
La precuela tiene lugar durante el décimo juego anual de los Juegos del Hambre, mientras que la historia de Katniss comienza en el juego número 74, lo que significa que «Songbirds» se desarrolla 64 años antes de la serie original. En la precuela, el país norteamericano conocido como Panem es todavía relativamente joven y su gobierno todavía está ideando formas creativas y despiadadas de mantener a los ciudadanos oprimidos. Todavía existen grupos rebeldes, al igual que culturas vibrantes que aún no han sido exterminadas por las fuerzas de paz. Sin embargo, en los juegos 74, Panem es un gobierno totalitario del que parece imposible escapar, y «La balada de los pájaros cantores y las serpientes» explica cómo ese control gubernamental se intensifica.
La película también proporciona una historia de fondo esencial para el villano principal de la trilogía de libros, el presidente Corialanus Snow (Donald Sutherland de adulto, Tom Blyth en su juventud). Antes de ser dictador, Coryo era un niño ambicioso pero medio muerto de hambre que intentaba hacerse pasar por una de las élites ricas del Capitolio. ¿Cómo pasó Snow de ser un bombón con corazón a un viejo canalla que todos desearían que estuviera muerto? Tiene algo que ver con una cantante folk llamada Lucy Gray (Rachel Zegler), y al final del amplio tiempo de duración de «Ballad of Songbirds and Snakes», todo tendrá sentido.