Joseph Fiennes sabía desde hacía mucho tiempo que se acercaba el fin de Fred Waterford. El actor revisó su proceso de preparación y reveló que había estado trabajando para el momento durante los últimos cuatro años. Fiennes describió cómo su personaje no había cambiado: Fred Waterford tiene una personalidad compleja que a menudo se esconde detrás del frente de «buen chico» que se apresura a poner. En realidad, Fred es consciente de los horrores que le ha infligido a June (Elisabeth Moss) y de las injusticias sistémicas de las que ha sido parte. Y estando en Canadá, lejos de las mentes despiadadas y entrometidas de Gilead, Fred se ve obligado a mirar sus fechorías a través de las circunstancias en las que se encuentra.
«En muchos sentidos, los últimos cuatro años han sido una preparación. Realmente no necesitaba mentalizarme. Lo que realmente estaba buscando, y tal vez esto es demasiado detallado para la respuesta, pero: no creo que Fred tenga convertirse en una persona diferente por cualquier medio. Pero creo que se ve obligado a mirarse a sí mismo a través de las circunstancias en las que se encuentra, lo que no necesariamente habría sucedido si estuviera en Gilead».