Níger tiene un nuevo primer ministro. En la noche del lunes 7 de agosto, doce días después del golpe de estado contra el presidente Mohamed Bazoum, y mientras este último aún está detenido por los hombres de la guardia presidencial, la junta, encabezada por el general Abdourahamane Tiani, designó jefe de gobierno a Ali Mahamane Lamine. Zeine, economista de formación de 58 años. El nombramiento se produjo cuando se reanudaron en Niamey las iniciativas para una salida diplomática a la crisis.
Una figura conocida para los nigerianos, el nuevo primer ministro no es un novato en política y goza de reputación como un tecnócrata competente. Formado en la Escuela Nacional de Administración de Niamey y graduado del Centro de Estudios Financieros, Económicos y Bancarios de Marsella y París-I, inició su carrera en el Ministerio de Economía y Finanzas en 1991, bajo el gobierno de transición encabezado por Amadou Cheiffou, el día después de la conferencia nacional por la paz civil que estableció el advenimiento de la democracia multipartidista en Níger.
Posteriormente, Ali Lamine Zeine se convirtió en jefe de gabinete del presidente Mamadou Tandja, un soldado que había participado en el golpe de Estado contra el presidente Diori Hamani, antes de convertirse en magistrado supremo en 1999. Nombrado ministro de Finanzas en 2003, el economista permanecerá en el cargo hasta el derrocamiento del Sr. Tandja en febrero de 2010. Este golpe condujo a elecciones un año después durante las cuales Mahamadou Issoufou, predecesor de Mohamed Bazoum, fue elegido presidente.
Originario de Zinder, la segunda ciudad más poblada del sur de Níger, Lamine Zeine es el primer toubou, un grupo étnico presente principalmente en el norte y el este del país, en convertirse en primer ministro. Tiene una sólida libreta de direcciones en África Occidental, acumulada cuando trabajaba en el Banco Africano de Desarrollo, en Côte d’Ivoire y Gabón. Era hasta ahora representante de este organismo financiero africano en N’Djamena, la capital de Chad.
Nombramientos de dos generales y un coronel
Su nombramiento por el Consejo Nacional para la Salvaguardia de la Patria (CNSP, el organismo militar gobernante) fue anunciado al día siguiente de la expiración del ultimátum dado por la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) a los golpistas para que liberaran al presidente Bazoum y restaurarlo en el cargo. El lunes también se reasignaron otros tres puestos.
El general de brigada Amadou Didilli, hasta entonces secretario general del Ministerio de Defensa, fue designado al frente de la Alta Autoridad para la Consolidación de la Paz, organismo público político-militar creado en 1995 para supervisar la implementación de los acuerdos de paz firmados ese año con Grupos rebeldes tuareg. Reemplaza al General Mahamadou Abou Tarka.
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