El presidente de Estados Unidos Joe Biden anunció el miércoles una condonación parcial de los préstamos estudiantiles, un tema que está provocando un acalorado debate en un país donde un año en la universidad puede costar decenas de miles de dólares. “Según mi promesa de campaña, mi administración está anunciando un plan para dar un respiro a las familias trabajadoras y de clase media mientras se preparan para reanudar los pagos de préstamos estudiantiles federales en enero de 2023”, tuiteó Joe Biden, prometiendo detalles por la tarde.
De acuerdo con mi promesa de campaña, mi Administración está anunciando un plan para dar un respiro a las familias trabajadoras y de clase media mientras se preparan para reanudar los pagos de préstamos estudiantiles federales en enero de 2023.
Tendré más detalles esta tarde. pic.twitter.com/kuZNqoMe4I
— Presidente Biden (@POTUS) 24 de agosto de 2022
La medida, anunciada menos de tres meses antes de la elecciones intermedias, es para personas que ganan menos de $125,000 al año, según una ilustración que acompaña al tuit del presidente. Se tratará de borrar 10.000 dólares para las personas que no se hayan beneficiado de una beca federal para pagar los gastos relacionados con sus estudios universitarios, y 20.000 dólares para quienes, con medios más modestos, la hayan recibido. El plan fue anunciado luego de meses de reflexión en la Casa Blanca sobre este tema, que también ha sido un dolor de cabeza para las administraciones anteriores. El ejecutivo estaba particularmente preocupado por la posibilidad de que la medida avivara una inflación ya galopante.
Una deuda promedio de $25,000
Los senadores demócratas Chuck Schumer y Elizabeth Warren saludaron en una declaración conjunta «un paso gigante hacia la resolución de la crisis de la deuda estudiantil».
Con el movimiento de un bolígrafo, el presidente Biden ha dado un gran paso adelante para abordar la crisis de la deuda estudiantil al cancelar cantidades significativas de deuda estudiantil para millones de prestatarios.
Mi declaración con @SenWarren: pic.twitter.com/LuZo8EowyD
—Chuck Schumer (@SenSchumer) 24 de agosto de 2022
La líder del Partido Republicano, Ronna McDaniel, por el contrario, juzgó que esta medida “castiga injustamente a los estadounidenses que han ahorrado para la universidad o han elegido una carrera diferente”. Las universidades estadounidenses pueden cobrar entre $ 10,000 y $ 70,000 al año, y muchos estudiantes comienzan su vida laboral con una gran deuda.
Según estimaciones del gobierno, la deuda promedio de los estudiantes estadounidenses cuando se gradúan es de $25,000, una suma que muchos tardan años o incluso décadas en pagar. En total, unos 45 millones de prestatarios en el país deben colectivamente 1,6 billones de dólares, según la Casa Blanca. Joe Biden también anunció que una moratoria en el pago de préstamos estudiantiles, introducida durante la pandemia de COVID-19se extendería hasta fin de año.