Factura de la luz: aquí está el tipo de placa que más consume


La elección de los electrodomésticos juega un papel fundamental en el consumo energético de tu hogar. Así, en la cocina, es mejor conocer la potencia de una vitrocerámica antes de comprarla.

El consumo de energía de una placa depende de varios criterios, incluida la potencia máxima del aparato y la tecnología elegida.

Las placas de inducción, las vitrocerámicas y las eléctricas son, en efecto, muy diferentes. Cuanto más potente sea la placa, menor será el tiempo de cocción.

Según el sitio especializado Electroguide, el agua hierve a los cuatro minutos con una placa de inducción, cinco minutos con una vitrocerámica, nueve minutos con una cocina de gas y diez minutos con una placa eléctrica.

¿Qué plato consume más?

Con una potencia que oscila entre los 1.000 y los 2.000 Watios, la placa eléctrica clásica es el aparato que más consume. Poca potencia, este tipo de placa obliga a sus usuarios a cocinar los alimentos durante más tiempo.

La vitrocerámica, con una potencia de 1.200 a 2.700 Watios, tiene un consumo energético considerado medio. Más moderno, se calienta muy rápido pero tiene el inconveniente de permanecer caliente unos minutos después de apagarlo.

Presentes en las cocinas de nuestros padres o abuelos, las placas de gas (de 800 a 3.500 W) consumen relativamente poca energía y permiten una cocción rápida y precisa. Sin embargo, una pérdida de calor le impide obtener el título de Placa Virtuosa.

En definitiva, es la placa de inducción (entre 2.000 y 3.700 W) la que destaca como campeona de las placas de cocción, tanto en rendimiento como en consumo energético. Fácil de usar y seguro (no se mantiene caliente después de su uso), también es más caro y solo admite cierto tipo de sartenes o cacerolas.



Source link-60