A raíz de su despido, Harmon admitió con franqueza su naturaleza combativa y fanática del control. «No digo que no puedas hacer una buena versión de ‘Community’ sin mí», escribió en su blog. «Pero definitivamente estoy diciendo que no puedes hacer mi versión, a menos que tenga la opción de decir, ‘Tiene que ser así, o lo dejo’ aproximadamente ocho veces al día».
Estas no son las condiciones ideales para ningún tipo de entorno de trabajo, pero durante siglos hemos excusado los excesos y pecadillos de los artistas como el alto costo de recibir un gran arte. Tu visión es tu visión, y puede ser brillante, pero, en las artes escénicas, la miríada de actores y miembros del equipo que se esfuerzan al máximo para servir a tu genio no son autómatas. Un plató de cine no es un plató de maquetas de trenes.
En cualquier caso, Harmon se había ido, lo que resultó en una temporada mediocre de 13 episodios de «Community», que se sintió como la muerte del programa. Los fanáticos y los críticos lo odiaron, el elenco y los escritores estaban disgustados, y las calificaciones mejoraron. Después de terminar en el puesto 144 en el derby de Nielsens durante su tercera temporada, el espectáculo se disparó hasta el puesto 133.
Sorprendentemente, «Community» recibió un indulto. Y esta suspensión de la ejecución fue obra de la estrella Joel McHale.