Los alcaldes de Essonne organizan «colos» interdistritales para romper rivalidades históricas entre pandillas


Es una apuesta de futuro que se podría resumir así: amigos niños, amigos para siempre. Es a esto a lo que apuestan cuatro alcaldes del departamento de Essonne, cuyas ciudades están muy golpeadas por el fenómeno de las reyertas entre bandas rivales. Con la organización de actividades conjuntas para niños de 9 a 11 años, a lo largo de todo el año, pretenden romper, incluso antes de que nazca, el sentimiento de pertenencia exclusiva a un solo territorio, a un solo distrito. “La idea es lograr que nuestros hijos se conozcan y construyan una historia común cuando son pequeños, para que, cuando crezcan, tengan menos ganas de ponerse de cabeza”, explica el alcalde de Epinay-sous-Sénart, Damien Allouch (Partido Socialista). El punto culminante de este sistema de prevención sin precedentes: el campamento de verano.

Enzo es hilarante, sobre la luna, » muy feliz « a la idea de pasar cinco días con sus amigos del «vigilia interco», entender “intermunicipal”. Son las 9:30 horas de este lunes de finales de julio, en el aparcamiento del centro de arte y cultura de Epinay, unos cuarenta niños de los cuatro pueblos patean mientras esperan la llegada del autobús que les conducirá al Indro.

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Enzo tiene 9 años, gorra y tenis, una pequeña maleta con ruedas y el deseo de ser amigo de todos. Con los chicos de su ciudad, Quincy-sous-Sénart, pero también con jóvenes de Varennes-Jarcy, Boussy-Saint-Antoine y Epinay-sous-Sénart, la ciudad «enemigo», aquel con el que generaciones de hermanos mayores han estado luchando durante casi medio siglo, desde la construcción de los barrios obreros. «No hablamos mucho de eso, deslizar enzo, es mejor que no, porque bueno… los grandes, no se mezclan mucho…»

Durante la estancia intermunicipal de los municipios de Epinay-sous-Sénart, Boussy-Saint-Antoine, Quincy-sous-Sénart y Varennes-Jarcy, en Saint-Cyran-du-Jambot (Indre), el 28 de julio de 2022.

“Borrar todas estas barreras”

Algunos se odian y luchan entre sí, a veces hasta la muerte. Sin saber muy bien por qué. “Hasta donde podemos recordar, las rivalidades siempre han existido, sin saber las causas, todos somos del territorio, este tema de los límites municipales es parte de nuestro ADN”, recuerda el Sr. Allouch. En 2021, un niño de 14 años fue apuñalado en Boussy-Saint-Antoine y otro, aún más joven, resultó gravemente herido durante una reyerta entre dos distritos rivales de Quincy y Epinay. El día anterior, otra pelea había provocado la muerte de una niña de 14 años, a unas decenas de kilómetros, en Saint-Chéron.

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“Con las actividades todos juntos y el campamento intermunicipal los niños de los diferentes pueblos se conocerán, cuando lleguen todos a la escuela se reconocerán, es lindo y muy tranquilizador para nosotros los padres”, comenta la madre de Enzo, Linda, de 33 años (no quiere dar su nombre). Desde la primera reunión «intercomunicador» Hace unos meses, Erynn, de 11 años, se ofreció como voluntaria para hacer de intermediaria. Originaria de Epinay-sous-Sénart, se mudó a Boussy-Saint-Antoine hace dos años. Gracias a las actividades intermunicipales, se reencontró con sus viejos amigos a quienes se apresuró a presentarles la noticia. “Ella estaba emocionada de hacerlocomenta su madre, Yamina (ella desea permanecer en el anonimato). Lograr que se conozcan así cuando eran jóvenes es genial, les da la oportunidad de no pelear ni una sola vez en la universidad. »

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