Familiares de pandilleros detenidos exigen su liberación en una protesta en la capital, San Salvador.
(dpa) El Salvador extraditó a Estados Unidos a dos presuntos miembros de una pandilla juvenil violenta. “Agradecemos al gobierno de El Salvador por el paso adelante que representan estas extradiciones”, escribió el miércoles el secretario de Estado de Estados Unidos, Brian Nichols, en Twitter. A pesar de su llamada guerra contra las pandillas, el gobierno del presidente Nayib Bukele hasta ahora ha mostrado poca disposición a responder a las solicitudes de extradición de Estados Unidos.
Los dos integrantes de la Mara Salvatrucha (MS-13) deberán responder ante tribunales estadounidenses por, entre otros, homicidio, crimen organizado, concierto para delinquir y narcotráfico. La MS-13 es uno de los dos sindicatos del crimen responsables de la mayoría de los delitos violentos en el país centroamericano. El grupo de mafiosos fue fundado en Estados Unidos en la década de 1980 por inmigrantes salvadoreños. La pandilla también sigue activa en los Estados Unidos.
Tras una ola de asesinatos que acabó con la vida de 62 personas en un solo día, el gobierno de Bukele declaró el estado de emergencia a fines de marzo para combatir a las pandillas. Como resultado, se suspendieron una serie de derechos fundamentales. La medida ya ha sido prorrogada varias veces por el Parlamento. Hasta la fecha, casi 49.000 presuntos pandilleros han sido arrestados.