Pony Ma, el fundador del gigante chino de Internet Tencent, había juzgado «impactante» en 2022 el nivel de corrupción en su empresa y había prometido medidas, según comentarios divulgados entonces por los medios estatales.
Las sanciones cayeron: “Más de 120 personas fueron despedidas” de la empresa y cerca de veinte fueron denunciados ante las autoridades por haber violado sus normas antifraude, en particular por corrupción y malversación de fondos, indicó el grupo en un comunicado de prensa publicado el viernes 2 de febrero.
Durante el año 2023, se detectaron más de 70 violaciones del código de buena conducta, destacó Tencent, gigante mundial de los videojuegos y actor clave de la tecnología en China gracias a su aplicación WeChat (mensajería, pago en línea, red social), presente en casi todos los teléfonos del país.
Algunos de los empleados acusados de corrupción y despedidos pertenecían a la filial del grupo PCG, responsable de la distribución de contenidos (noticias, deportes, películas, etc.). Otros trabajaban en la rama de servicios médicos del grupo, del que Tencent es uno de los principales actores en China con sus aplicaciones de telemedicina.
Vuelta de tuerca de las autoridades
Uno de los empleados implicados por Tencent fue condenado a cuatro años de prisión y una multa de 100.000 yuanes (12.900 euros), principalmente por “apropiación indebida de bienes” de la empresa, según el comunicado de prensa. El grupo cuenta actualmente con poco más de 100.000 empleados.
Estos anuncios llegan tras varios años difíciles en China para los gigantes digitales. Después de un crecimiento meteórico, el sector ha experimentado una recuperación repentina a partir de 2020 por parte de las autoridades para regularlo aún más. Esta vuelta de tuerca provocó la pérdida de miles de millones de dólares en capitalización bursátil y lastró los resultados de poderosas empresas de Internet. Tencent no se había librado.
Las restricciones en China al tiempo de juego online para menores de 18 años también han supuesto un duro golpe para la rentabilidad del grupo. Tencent busca ahora más oportunidades en el extranjero, especialmente en Europa, donde la firma se fortalece con la adquisición de participaciones en estudios emblemáticos de videojuegos.