Mientras trabajan para recuperar la información del panel de datos imperial cifrado que robó Omega, los héroes del programa se encuentran con una nueva amenaza nativa de Barton IV en forma de Ice Wyrms gigantes. Estos Wyrms son sensibles a las vibraciones y son repelidos por sensores clavados en el suelo alrededor de la base. Cuando se corta la energía, los Ice Wyrms atacan y se lanzan bajo la superficie para atacar al Bad Batch.
Estos Wyrms son en realidad opuestos a los gusanos de arena de «Dune». En «Dune», los gusanos de arena se ven afectados por las vibraciones de los golpes que los Fremen colocan en el suelo para llamarlos, que sirven para atraerlos en lugar de repelerlos como en «The Bad Batch». Aun así, los Ice Wyrms que viajan a través de la nieve parecen un corolario helado de los gusanos de arena de Arrakis. Es un paralelo muy interesante y un guiño respetuoso a una de las franquicias de ciencia ficción que «Star Wars» ha tomado prestada desde el primer día.
De hecho, hay varias líneas directas que se pueden trazar entre «Dune» y «Star Wars». El mundo de «Dune», al igual que «Star Wars», está gobernado por un Emperador prácticamente invisible. En ambos, un héroe surge en un planeta desértico, con «Star Wars» sustituyendo a Tatooine por Arrakis. Uno de los homenajes más obvios, sin embargo, es que las especias son un bien muy valioso vinculado a un poderoso señor del crimen (Jabba the Hutt en «Star Wars» y el barón Vladimir Harkonnen en «Dune», respectivamente).
Incluso se podría argumentar que los hijos gemelos de Paul Atreides en «Dune: Messiah», que nacen después de su propia conversión en una figura religiosa genocida y antes de marcharse al desierto, fueron una inspiración para el linaje de Luke y Leia. (que también nacieron de un padre que fue percibido como una especie de mesías solo para convertirse en una figura religiosa genocida).