Gabón es un paraíso natural: el 80 por ciento del país es bosque primitivo. Hasta ahora, el país se ha ganado la vida con el petróleo, pero ahora el ministro de Medio Ambiente, Lee White, quiere hacer de Gabón un país modelo verde. Gabón quiere desarrollar económicamente la selva tropical sin destruirla. Por el contrario, la tala debe proteger la naturaleza y el clima y hacer que Gabón sea independiente de la industria del petróleo.
La empresa suiza Precious Woods, especializada en la gestión sostenible de los bosques tropicales, está desempeñando un papel pionero. Con cientos de empleados, la empresa administra vastos bosques que son el hogar de los últimos elefantes y gorilas del bosque en la tierra.
El «Formato NZZ» llega al fondo de la cuestión de si la deforestación y la conservación de la naturaleza realmente van de la mano. Porque los críticos dicen que cada árbol talado es demasiado.