El activista de la oposición bielorrusa, Igar Lednik, murió en prisión donde cumplía condena por «difamación» del presidente Alexander Lukashenko, anunció el martes 20 de febrero su antiguo partido y la ONG de derechos humanos Viasna, en este país que cuenta con más de mil presos políticos.
“Igar Lednik, exmiembro del Partido Socialdemócrata Bielorruso (Gramada), activista y periodista, murió en prisión a la edad de 64 años”, anunció la organización política en Telegram, información confirmada por Viasna. Detenido en diciembre de 2022, fue condenado a tres años de prisión por «difamación» del presidente bielorruso debido a una publicación en un periódico del Partido Socialdemócrata, añadió la organización política.
Salud deteriorada
En prisión, su salud se había deteriorado “considerablemente deteriorado”, señaló el partido, dirigido por activistas radicados en el extranjero. La organización agregó que había sido operado por un problema en el sistema gastrointestinal, y también padecía una afección cardíaca, pero no precisó la causa de su muerte ni la fecha exacta.
La represión ha estado en pleno apogeo en Bielorrusia desde las elecciones presidenciales de 2020, consideradas fraudulentas y ganadas por Alexander Lukashenko, en el poder desde 1994 y fiel aliado de Vladimir Putin en Rusia. La votación dio lugar a manifestaciones de protesta de una magnitud sin precedentes que fueron duramente reprimidas.
Más de 1.400 presos políticos en Bielorrusia
Desde entonces, cientos de activistas, periodistas, defensores de los derechos humanos y ciudadanos comunes y corrientes han sido condenados a largas penas de prisión o se han visto obligados a exiliarse. Según la ONG Viasna, en Bielorrusia hay actualmente más de 1.400 presos políticos.
Igar Lednik es el séptimo preso político que muere bajo custodia en Bielorrusia desde 2021, según la misma fuente. A principios de enero, Vadzim Khrasko murió de neumonía en una colonia penitenciaria, según Viasna. Organizaciones bielorrusas de derechos humanos denunciaron sus condiciones de detención, asegurando que no había recibido la atención médica que necesitaba.