«Viernes 13» generalmente evoca imágenes de Jason con su máscara de hockey y la escalofriante melodía «ch ch ch, ah ah ah» que acompaña a la mayoría de sus muertes. Pero los fanáticos de la franquicia desde hace mucho tiempo saben muy bien que Jason apenas aparece en la primera película y que la máscara de hockey no entra en la ecuación hasta «Viernes 13 Parte III».
La trágica historia del origen de Jason siempre lo ha convertido en el centro de atención de la franquicia. Un repaso rápido: cuando era niño, Jason Voorhees vivía con anomalías físicas y discapacidades mentales. Su madre, Pamela, trabajaba en Camp Crystal Lake. Mientras estaba en el campamento con su madre, Jason fue intimidado y arrojado al lago, donde se ahogó. Nunca se responsabilizó a nadie por la supuesta muerte de Jason.
En la primera película, el hijo de los dueños originales del Campamento Crystal Lake intenta reabrir el campamento 22 años después del ahogamiento de Jason. Pamela Voorhees venga a su hijo matando al dueño y a todos menos uno de los consejeros del campamento. Pamela finalmente es decapitada por el único consejero del campamento sobreviviente, quien luego descubre que Jason todavía está vivo.
Debido a sus propias experiencias, el productor Bryan Fuller dice que la trágica historia de fondo de Jason y el amor eterno de Pamela Voorhees son lo que hizo que se enamorara de la serie.