Éste es uno de los temas que preocupa a los franceses: las chinches. Este viernes se celebró una reunión interministerial mientras cuatro escuelas permanecen cerradas a causa de estos pequeños bichos. Una ansiedad colectiva se ha extendido a Francia, a veces con importantes repercusiones psicológicas.
Éste es el tema de actualidad y que empieza a preocupar a algunos franceses: la proliferación de chinches. Estas pequeñas criaturas que envenenan nuestras vidas en el transporte y en los cines. E incluso cuando no tenemos ninguno en casa, consiguen arruinar la vida de personas ansiosas por naturaleza y que quizás no sobrelleven bien la situación actual.
Necesitamos regular nuestra ansiedad con actividades que relajen
Según el doctor Antoine Pelissolo, jefe del servicio de psiquiatría del hospital Henri Mondor de Créteil, este tema puede provocar un estrés equivalente a otra situación que todos hemos vivido: «seguramente hay similitudes entre esta preocupación por las chinches pero también con la pandemia COVID-19«. Por lo tanto, este problema debe abordarse para las personas que más lo necesitan.
Pero ¿cómo tratar esta ansiedad? Para el doctor Pelissolo es absolutamente necesario regularlo con actividades que nos relajen porque nos “permitirán no quedarnos concentrados” en el problema que estamos atravesando. Además, este problema de chinches afecta a la relación que podemos tener con los demás.
Porque a menudo no se comprende bien la forma en que se propagan. Fácilmente podemos tener “la impresión de que vienen de otros, de que son ellos quienes nos los han traído”, como nuestros vecinos, por ejemplo. Una falta de comprensión que puede crear tensiones entre las personas ansiosas y quienes las rodean.
Pero este problema no afecta sólo a Francia: Argelia ha anunciado medidas preventivas para evitar la propagación de las chinches en su suelo. En consecuencia, se han decretado controles sanitarios en aviones, barcos y transporte terrestre.