Realmente debería saber que no debo perder la cabeza por un juego antes de que tenga un avance del juego, pero los primeros vistazos que hemos tenido de la adaptación de Arkane’s Blade ya me tienen entusiasmado. Además del breve adelanto en The Game Awards, el director de arte de Arkane Lyon Sebastián Mitton Recientemente compartió tres piezas de arte conceptual para el próximo juego de acción.
Esta primera imagen muestra al Daywalker mirando una plaza parisina abierta y me transmite fuertes vibraciones de Dishonored. Tienes esa distintiva arquitectura europea del siglo XIX que contrasta con la dura tecnología industrial: prácticamente grita los diseños icónicos del artista Viktor Antonov para Half-Life 2 y Dishonored.
La perspectiva también me da esperanzas de que el diseño de niveles verticales abiertos de Arkane encuentre un hogar en este cambio de género (o al menos de perspectiva, de primera persona a tercera). Dada la ambientación, tampoco puedo evitar pensar en el proyecto cancelado previo a Dishonored de Arkane, The Crossing, un shooter experimental que también se desarrolló en París.
El letrero en la distancia se traduce aproximadamente como «está prohibido violar el toque de queda», lo que coincide con el avance que nos muestra el cierre de París al anochecer. Obtienes esta imagen de París luchando contra una insurgencia vampírica en toda regla, con Blade contratado para lidiar con ella. También me pregunto si este toque de queda podría estar relacionado con algún tipo de ciclo día-noche, con más actividades no violentas durante el día.
La siguiente pieza muestra a Blade siendo invadido por una nube de murciélagos mientras vampiros apáticos miran desde un vagón de metro cercano. Este no tiene tantos detalles que resaltar, pero vamos, si estás haciendo una fantasía de vampiros neo-noir, probablemente tendrás uno o tres niveles de metro/alcantarillado.
La última parte del arte conceptual es la que más me intriga: muestra a Blade acercándose sigilosamente a un club nocturno (presumiblemente propiedad y operado por vampiros), con un grupo de bichos raros con trajes barrocos alineados en la entrada y bañados en luz violeta.
En primer lugar, tomo esto como una fuerte indicación de que Blade seguirá teniendo el sigilo característico de Arkane, tal vez en una proporción similar a su anterior simulador inmersivo de acción, Deathloop. En segundo lugar, esto simplemente está emitiendo un club nocturno Y2K tan fuerte con la energía de los rociadores de sangre que realmente anhelo de las cosas de vampiros de hoy en día. Es parte de lo que tanto me gustó de Vampire: The Masquerade – Bloodlines, y realmente no puedo esperar a ver estas ideas en acción.
No tenemos nada cercano a una fecha de lanzamiento para Arkane’s Blade, pero creo que será algo a seguir en el futuro. Por ahora, se une a Elden Ring: Shadow of the Erdtree como un juego que me entusiasma excesivamente, solo por el arte conceptual y la reputación del desarrollador.