Un juez de Nuevo México denegó el viernes la moción de Alec Baldwin para desestimar su acusación de homicidio involuntario, manteniendo el caso programado para el juicio en julio.
La jueza Mary Marlowe Sommer rechazó cada uno de los argumentos de desestimación de los abogados de Baldwin y concluyó que el proceso del gran jurado no tenía prejuicios contra el actor.
Baldwin enfrenta hasta 18 meses de prisión si es declarado culpable de homicidio involuntario por la muerte de la directora de fotografía de “Rust”, Halyna Hutchins. Se le acusa de apuntar negligentemente con su arma a Hutchins y apretar el gatillo mientras se preparaba para filmar una escena, y también se le ha culpado de contribuir a normas de seguridad laxas en el set.
Los abogados de Baldwin intentaron desestimar la acusación, argumentando que la fiscal Kari Morrissey desvió al gran jurado de información exculpatoria y no proporcionó testigos de la defensa.
En su fallo del viernes, Marlowe Sommer señaló que Morrissey había leído una carta de la defensa palabra por palabra a los grandes jurados, y los grandes jurados decidieron no darle seguimiento.
«El Tribunal no está en condiciones de cuestionar la decisión del gran jurado a este respecto», escribió el juez.
La defensa también argumentó que Morrissey había interrumpido repetidamente a los miembros del gran jurado mientras intentaban hacer preguntas a los testigos de cargo, negándole así a Baldwin una audiencia justa.
Aunque la jueza expresó su preocupación sobre esa cuestión durante una audiencia sobre la moción la semana pasada, finalmente concluyó que las acciones de Morrissey no impidieron la capacidad de los miembros del gran jurado para realizar una investigación independiente.
“Aunque el Estado aplazó ciertas preguntas, en muchos otros casos los miembros del gran jurado hicieron preguntas probatorias y recibieron respuestas completas de los testigos”, escribió Marlowe Sommer.
Baldwin ha negado haber apretado el gatillo y también ha negado que fuera su responsabilidad asegurarse de que el arma estuviera a salvo.
Sus abogados, Alex Spiro y Luke Nikas, emitieron una breve declaración después del fallo del viernes: «Esperamos con ansias nuestro día en la corte».
La armera de la película, Hannah Gutiérrez Reed, ya cumple una condena de 18 meses de prisión tras ser declarada culpable de homicidio involuntario en marzo. Los fiscales argumentaron que ella fue descuidada y poco profesional, y que no se aseguró de que ninguna bala real llegara al set.
Los abogados de Baldwin han presentado dos mociones adicionales para desestimar el caso. En el primero, argumentan que el FBI rompió el arma utilizada en la escena, negando así a la defensa una oportunidad justa de demostrar que no estaba funcionando en el momento del tiroteo. En la segunda moción, la defensa argumenta que las acusaciones no cumplen con el estándar requerido para homicidio involuntario.