Eric Cantú, un joven de 17 años que estaba desarmado cuando un oficial de policía de San Antonio abrió fuego contra él afuera de un restaurante McDonald’s, salió del hospital después de recuperarse de sus heridas.
La madre del adolescente, Victoria Casarez, le dijo a KSAT que su hijo regresó a casa después de más de un mes recuperándose del incidente del 2 de octubre. Ella compartió que su viaje de recuperación continuará con “mucha rehabilitación y amor”.
El oficial que le disparó al adolescente, James Brennand, fue despedido por el Departamento de Policía de San Antonio. También ha sido acusado de dos cargos de asalto agravado por parte de un servidor público, que es un delito grave de primer grado.
Brennand fue liberado de una cárcel local luego de pagar una fianza de $200,000 y está a la espera de su juicio.
El estómago, el diafragma, los pulmones, el hígado, el bíceps y el antebrazo de Eric resultaron dañados como resultado del tiroteo. Inmediatamente después del incidente, Eric recibió soporte vital, pero desde entonces se ha recuperado.
El 1 de octubre, el Sr. Brennand intentó detener el vehículo de Eric después de verificar las placas y descubrir que la licencia no coincidía con el automóvil. Eric supuestamente se fue, pero el Sr. Brennand no lo persiguió.
La noche siguiente, el Sr. Brennand vio el vehículo estacionado en un estacionamiento de McDonald’s y se acercó a la puerta del lado del conductor para confrontar a Eric. El oficial abrió la puerta del lado del conductor de Eric y comenzó a gritar órdenes, pero Eric cerró la puerta e intentó irse.
En ese momento, el Sr. Brennand sacó su pistola y disparó varias veces a la puerta del lado del conductor, hiriendo a Eric varias veces.
Eric fue llevado a un hospital local y puesto en soporte vital.
La ciudad retiró un cargo de «evadir la detención» contra Eric por huir del oficial durante el tiroteo. También se reveló que Eric no conducía un vehículo robado la noche del incidente.
La escena fue capturada en la cámara corporal del Sr. Brennand y mostró al oficial acercándose al vehículo, abriendo la puerta y respondiendo con disparos cuando el adolescente se alejó.
El jefe de policía de San Antonio, William McManus, dijo que las acciones del oficial eran indefendibles.
“No hay nada que pueda decir en defensa de las acciones de ese oficial esa noche”, dijo. “Creo que lo que sucedió, inicialmente, hubo algún contacto, pero eso no justificó el tiroteo”.