La Primera Ministra, Elisabeth Borne, afirmó, el martes 30 de agosto, que los eventuales cortes de gas, en caso de escasez de esta fuente de energía, no afectarían a los hogares. “Los recortes, no preocupan a los hogares (…), no vamos a cortar el gas en los hogares franceses, pero es [chez] nuestros negocios, los grandes consumidores, que puede haber recortes”dijo en el programa ‘Diario’ del canal TMC.
Para evitar cortes, volvió a invitar a los franceses, particulares y empresas, a reducir su consumo de gas y electricidad, mientras se paran algunos reactores nucleares que producen esta última:
“Cualquier cosa que podamos hacer para reducir nuestro consumo evitará que entremos en situaciones en las que deberíamos tener recortes. »
Estos podrían ocurrir “Si todas las suposiciones equivocadas se juntan: si Rusia corta sus suministros, si alguna vez hay tensión sobre el GNL [gaz naturel liquéfié] y que no se cumplan los pedidos que hemos hecho, si hay un invierno muy frío”enumeró.
Contra “una sociedad en decadencia”
La Jefa de Gobierno explicó una vez más que estaba a favor de “medidas radicales” en términos de transición ecológica pero que no sustentaba un modelo de «decrecimiento» :
“En Francia, todos estamos apegados a nuestro modelo social (…). Debemos conciliar cambios radicales para luchar contra el cambio climático, pero esto no debe llevarnos a abogar por una sociedad en decadencia. Financiar nuestro modelo social no es compatible con quienes defienden el declive. Necesitamos encontrar un nuevo modelo de crecimiento sostenible. »
El lunes, ante la patronal reunida por el Medef para su regreso, la Sra. Borne había instado a las empresas a la sobriedad energética, pidiéndoles que «participar» para reducir el consumo de energía este invierno, pero sin anunciar ninguna medida vinculante.