660 días después del inicio de la invasión rusa de ucranialos combates continúan en todos los frentes y nada parece poder detenerlos. Diez millones de civiles : mujeres, niños y ancianos han huido de sus hogares desde el comienzo de la guerra, según la ONU. Desde el 24 de febrero de 2022, ninguno de los gobiernos involucrados en este conflicto ha proporcionado datos sobre el número de víctimas. Invitado al micrófono de Pierre de Vilno, el embajador extraordinario y plenipotenciario de Ucrania en Francia, Vadym Omelchenko, ofrece las primeras informaciones sobre el coste humano de esta guerra.
Los rusos destruyen todo rastro de sus crímenes.
En poco más de año y medio de guerra, las pérdidas militares han sido importantes. En cuanto a los civiles, es difícil establecer el número exacto de víctimas: «Puedo decirles que las pérdidas son importantes por nuestra parte. Tenemos pérdidas militares, pero también muchas pérdidas entre civiles. Y puedo darles el número exacto de niños asesinados: 510». Una valoración que es sólo provisional, ya que no tiene en cuenta a los niños asesinados en los territorios ocupados por Rusia.
Además, es posible que nunca se pueda establecer con certeza el número exacto de víctimas debido a las prácticas rusas en esos mismos territorios: «Para Mariúpol, destruyeron la ciudad, pero también todo rastro de sus crímenes de destrucción de seres humanos. Había fosas colectivas, utilizaban crematorios móviles». A pesar de todo, hay pruebas y testigos de los crímenes cometidos en Ucrania: «Él (Étienne de Poncins, embajador de Francia en Ucrania, nota del editor) me dijo que, cuando llegó por primera vez a Izyum vio las fosas comunes con sus propios ojos. Eran familias enteras, padres con sus hijos”.
Alexander Orlov, ex embajador de Rusia en Francia, había dicho, todavía ante el micrófono de Pierre de Vilno, la semana pasada, que los rusos sólo atacaban instalaciones militares o generadores. Una afirmación que Vadym Omelchenko contradice: «Es mentira. Tenemos testigos: expertos independientes, investigadores franceses, gendarmes. Lo que dicen estos títeres, no quiero ni comentarlo. Será el tribunal internacional el que dará su opinión».