Inglaterra autorizará el cultivo y comercialización de nuevos OMG


Después de varios meses de consultas, el gobierno británico finalmente debía hacer público, el miércoles 25 de mayo, su proyecto de ley (Genetic Technology Bill) para facilitar el cultivo y comercialización de nuevos OGM. El texto se refiere únicamente a las plantas cuyo genoma ha sido modificado localmente (edición de genes en inglés) utilizando tecnologías recientes que consisten en activar o desactivar genes tomando una pequeña parte del ADN. Se excluye la comercialización de plantas cuyo genoma se habría transformado mediante la adición de genes que a veces proceden de especies completamente diferentes (modificación genética en inglés).

La iniciativa de Londres es la primera en Europa, ya que la Unión Europea continúa prohibiendo la mayoría de los cultivos de especies genéticamente modificadas, incluso localmente sin la introducción de genes exógenos (tras una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE que data de 2018). Boris Johnson también promociona este proyecto de ley como uno de los principales «dividendos» del Brexit, ya que el divorcio de Bruselas le ha dado al Reino Unido la posibilidad de desviarse de las reglas europeas a las que estaba sujeto hasta entonces. « Comencemos a liberar ahora [de ses contraintes] El increíble sector de las biociencias del Reino Unido, desarrollemos plantas más resistentes que ayuden a alimentar al planeta». Así había lanzado el Primer Ministro nada más asumir el cargo, en el verano de 2019.

Leer también Artículo reservado para nuestros suscriptores Nuevos OMG: “La agricultura occidental ya ha vivido una revolución genética cuyas promesas no se han cumplido”

“Fuera de la UE, ahora somos libres de seguir la ciencia. Estas tecnologías de precisión nos permitirán acelerar la reproducción de plantas con resistencia natural a las enfermedades y un mejor uso de los nutrientes del suelo para lograr mayores rendimientos con menos pesticidas y fertilizantes”.también elogió a George Eustice, Ministro de Medio Ambiente y Agricultura, en un comunicado de prensa publicado el 25 de mayo.

Renuencia de Escocia y Gales

La decisión de flexibilizar las reglas (excluyendo las plantas genéticamente «editadas» de la regulación de los OGM) surge cuando el 87 % de las personas y el 64 % de las empresas que respondieron a la consulta pública del gobierno, emitida en septiembre de 2021, creen que la edición de genes plantea un mayor riesgo para la salud humana o el medio ambiente que las modificaciones genéticas naturales. Sin embargo, el Departamento de Agricultura del Reino Unido agregó que el 63 % de las instituciones académicas y el 82 % de los organismos públicos que participaron en la consulta creen que no existe un riesgo mayor.

Le queda por leer el 46,03% de este artículo. Lo siguiente es solo para suscriptores.



Source link-5