Vin Diesel aparentemente se inspiró mucho en la dulzura de Groot. Si bien la persona del árbol alienígena ocasionalmente ayudaba en un campo de batalla, parecía felizmente relajado la mayor parte del tiempo, asimilando el mundo como lo haría un niño. En la secuela de «Guardianes de la Galaxia», Baby Groot era literalmente un niño. Para un actor como Diesel, cuyo valor comercial se había convertido en interpretar personajes duros y canosos, Baby Groot fue un cambio de ritmo. Además, el papel le permitió ser más amable y emotivo que nunca. La dulzura le permitió al actor apreciar la vida, y la vida de un amigo, más abiertamente. Él dijo:
«Cuando lidiamos con la muerte, nuestro aprecio por la vida se representa de muchas maneras. […] Apreciamos todo lo que está vivo… Y este personaje celebra la vida, de muchas maneras. Es el personaje más inocente que he interpretado, claramente, por eso he sido tan tonto. No estoy hablando de temas pesados de los que suelo hablar con las películas que hago… ¡Me divierto!».
Como se puede imaginar, interpretar solo la voz de Groot, un personaje que solo puede decir tres palabras, fue un desafío que Diesel nunca había enfrentado antes. Enfrentaba los mismos desafíos que Ikue Otani, el actor que interpreta a Pikachu (que solo puede decir una palabra). Con un instrumento tan limitado, Diesel tuvo que encontrar nuevas formas de expresar emociones. Él dijo:
«Estaba siendo desafiado como actor, como actor dramático… la idea de interpretar a un personaje sin gestos faciales o permitir que la fisicalidad de tu cuerpo juegue con el personaje, y estar limitado a un vocabulario tan pequeño».