«The Howling» cuenta la historia de Karen White, una reportera que se recupera del trauma de ser acosada y agredida por un hombre llamado Eddie Quist. Cuando ella y su esposo viajan a un centro turístico llamado Colony, Karen rápidamente comienza a sospechar que lo que se supone que es una escapada relajante es en realidad mucho más siniestro de lo que parece. La película presenta algunos de los mejores efectos prácticos de hombres lobo que existen, gracias en gran parte al increíblemente talentoso Rob Bottin, y le fue relativamente bien en la taquilla. Sin embargo, en el momento en que se hizo, Dante se estaba quedando sin dinero y aparentemente no estaba seguro de qué hacer a continuación. Le dijo a The Guardian: «Me quedaban mis últimos dólares antes de conseguir el trabajo de ‘Gremlins’. Dirigí ‘The Howling’, a la que le fue bien, pero la compañía cerró antes de que pudieran pagarme. .»
Por suerte para Dante, Steven Spielberg, quien se desempeñó como productor ejecutivo en «Gremlins», lo tuvo en mente para la película y le envió el guión. Pero cuando Dante lo recibió por correo, estuvo bastante seguro de que no era para él. «Estaba convencido de que lo había enviado a la dirección equivocada», dijo. De hecho, la dirección era correcta y Dante accedió a hacerse cargo de la peculiar película.
«Gremlins» pasó a ser un enorme éxito, generando todo, desde secuelas hasta videojuegos, y hasta el día de hoy, todavía se celebra como una de las mejores películas de terror híbridas navideñas. ¿Y Dante? El lanzamiento de «Gremlins» esencialmente relanzó su carrera, allanando el camino para sus otros futuros clásicos como «Gremlins 2: The New Batch» y su fantástico retrato del infierno suburbano, «The ‘Burbs». Resulta que todo lo que Dante necesitó después de hacer “The Howling” fue una gotita de agua en forma de un buen guión, porque en cuanto lo tocó, sus películas y su éxito se multiplicaron como… bueno… gremlins.