Associated Press informó que al actor Jonathan Majors se le ordenó completar un programa de asesoramiento de un año de duración, pero el lunes evitó ir a la cárcel por agredir a su exnovia. El actor se había enfrentado a hasta un año tras las rejas después de que un jurado de Manhattan lo declarara culpable de un delito menor de agresión en diciembre.
Esto comenzó en marzo pasado cuando Jabbari acusó a Majors de atacarla en el asiento trasero de un automóvil con chofer, diciendo que le golpeó la cabeza con la mano abierta, le torció el brazo detrás de la espalda y le apretó el dedo medio hasta que se fracturó.
El lunes, el juez Michael Gaffey condenó a Majors a libertad condicional después de señalar que ambas partes acordaron que los cargos no justificaban pena de cárcel, dado que el actor era un delincuente por primera vez y no tenía antecedentes penales. Gaffey dijo que los Majors deben completar un programa de intervención en persona para agresores de un año de duración. Además, Majors tiene que continuar con la terapia de salud mental a la que sus abogados dicen que ha estado asistiendo. Majors enfrenta un año de cárcel si se le descubre violando los términos, que incluyen una orden de no contacto con su exnovia, Grace Jabbari.
La abogada de Majors, Priya Chaudhry, dijo que el actor no quería hacer ninguna declaración pública que Jabbari pudiera usar contra él en la demanda civil que presentó contra el actor. Majors, añadió, está «comprometido a crecer como persona» y completará cualquier programa ordenado por el tribunal «con el corazón abierto», aunque mantiene su inocencia.
Tras el veredicto de culpabilidad de diciembre, Marvel Studios eliminó instantáneamente a Majors como Kang the Conquerer, el gran villano que viaja en el tiempo y que estaba listo para ocupar un lugar central en la próxima ola de películas y programas de televisión. También fue despedido por su representante y otros proyectos que se anunciaron.
«Ha perdido toda su carrera», dijo Chaudhry en el tribunal. «Este ha sido el año más desafiante de su vida». Pero Jabbari dijo que Majors se niega a reconocer su culpa y sigue siendo un peligro para quienes lo rodean.
«No se arrepiente. No ha aceptado la responsabilidad», afirmó. «Hará esto otra vez y lastimará a otras mujeres. Él cree que está por encima de la ley».
En respuesta a las acusaciones, Majors lanzó una campaña de relaciones públicas que incluyó una entrevista televisada a nivel nacional, añadió la fiscal adjunta de distrito Kelli Galloway mientras abogaba por una sentencia de asesoramiento sobre violencia para Majors.