Aunque PC Gamer es, ante todo, un sitio web dedicado a juegos y hardware de PC, hemos estado cubriendo la creciente disputa sobre tecnología y fabricación de chips entre China y EE. UU. y sus aliados. Ya sea el bloqueo de equipos vitales para la fabricación de chips o la prohibición de la venta de ciertos chips de IA, este último acto en la disputa tecnológica de ojo por ojo podría afectar directamente cuánto pagamos por nuestras plataformas.
Tras la nueva propuesta de EE. UU. de prohibir la venta de los chips de IA más avanzados de Nvidia a las empresas chinas, China ha anunciado nuevos controles sobre la exportación de varios materiales y productos de galio y germanio. Según Bloomberg, estos controles entrarán en vigor el 1 de agosto. Las empresas que exportan los metales deben solicitar licencias y proporcionar información sobre a quién le están vendiendo y para qué se usarán los metales.
El motivo de los controles es «salvaguardar la seguridad y los intereses nacionales», según un comunicado emitido por el Ministerio de Comercio de la República Popular China.
Estos metales son vitales para la fabricación de semiconductores. El germanio fue un componente crítico del diseño inicial de transistores antes de ser reemplazado por silicio, aunque está experimentando un resurgimiento cuando se combina con silicio para producir aleaciones de silicio y germanio. Entre otras cosas, también se utiliza en la fabricación de paneles solares de alta eficiencia, fibra óptica, faros de automóviles de alta intensidad y retroiluminación de monitores LCD.
Según Bloomberg, el 94% de la producción mundial de galio proviene de China. El galio es mucho más relevante para la fabricación de chips, pero también es un componente importante de los teléfonos móviles, los productos de comunicaciones inalámbricas y, en particular, los LED azules.
China es, con mucho, el mayor productor de ambos metales, aunque esta posición se debe más a costos de producción más baratos que a la abundancia de los metales en sí. Christopher Ecclestone, director de Hallgarten & Co., dijo a Bloomberg: «Cuando dejan de suprimir el precio, de repente se vuelve más viable extraer estos metales en Occidente, entonces China nuevamente tiene un objetivo propio».
Aunque China no está bloqueando la exportación de los dos metales, queda por ver qué impacto tendrá este movimiento en la industria tecnológica en general. La fabricación de chips es un proceso con visión de futuro y habrá existencias y reservas de componentes importantes en caso de que haya un shock en el lado de la oferta. Pero estos materiales se utilizan para algo más que la fabricación de chips, y hay muchas posibilidades de que haya algunos efectos dominó y aumentos de precios en algunos productos en los próximos meses.
De una cosa podemos estar seguros: esta guerra tecnológica tiene el potencial de escalar mucho más. Las tecnologías avanzadas que incluyen IA, computadoras cuánticas y nodos sub 1nm contienen secretos que los países no quieren compartir.