Primero vino el autoelogio, luego la crítica. «Básicamente, hay que decir que este es un buen balance que ha permitido muchas inversiones», elogió el presidente del club ÖVP, Roland Breakfast, el desempeño del gobierno estatal el año pasado.
No obstante, fue posible reducir el nivel de deuda resultante del período Corona y las primeras medidas para amortiguar la inflación en 62,2 millones de euros. Eso da testimonio de «disciplina y responsabilidad presupuestaria limpia», dijo Frühstück, especialmente al oficial de finanzas, el gobernador Markus Wallner, Rosen.
Lo que falta es una hoja de ruta clara sobre cómo no solo continuar administrando el país, sino cómo hacerlo avanzar.
Sabine Scheffknecht, Neos
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Los Verdes tocaron un cuerno similar. El gobierno estatal no solo reaccionó rápido y decidió un paquete antiinflacionario. También se realizaron inversiones en áreas prometedoras como infraestructura, transporte público y cuidado de niños, dijo la jefa del club, Eva Hammerer.
Los partidos de oposición leen el balance de 2022 de una manera completamente diferente: «Uno busca en vano el coraje para dar forma a las cosas», critica Sabine Scheffknecht de Neos. Faltaban inversiones de futuro en todos los ámbitos, especialmente en vivienda social, movilidad, transición energética, jornada escolar y sistema social. El hecho de que los presupuestos para estos temas no se agoten hace que la política rosada sacuda la cabeza.
A pesar de los ingresos burbujeantes, el gobierno estatal ha defraudado en gran medida a la población.
Christof Bitschi, presidente estatal de la FPÖ
Foto: Mathis Fotografía
La crítica al FPÖ es muy similar. El presidente del estado, Christof Bitschi, carecía de medidas concretas contra la inflación, como compensación por costo de vida, ayuda para viajeros o una reducción en el impuesto al valor agregado sobre la energía.