Liga F: los futbolistas españoles confirman su huelga tras una oferta salarial “inaceptable”


Los jugadores de la primera división española, Liga F, continuarán con su huelga, anunciaron sus sindicatos el jueves 7 de septiembre. Cinco sindicatos, entre ellos AFE y Futpro, que exigen un aumento del salario mínimo de la liga femenina, convocaron la semana pasada a un paro para los dos primeros días del campeonato, denunciando una propuesta salarial «inaceptable». Estos últimos exigen salarios “a la altura del talento” jugadores, entre ellos algunos campeones del mundo españoles.

El salario mínimo actual es de 16.000 euros al año, y los sindicatos explican que han rebajado su demanda a 23.000 euros. Pero la Liga F se negó a aumentar su oferta más allá de los 20.000 euros al año. Una propuesta juzgada «inaceptable» por los jugadores, porque “Esto significaría, no lo olvidemos, ganar menos que los árbitros”denunciaron en un comunicado de prensa.

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En negociaciones desde hace un año.

Las negociaciones sobre salarios y condiciones de trabajo comenzaron hace un año, durante el paso al nivel profesional de la Liga F. Las discusiones que tuvieron lugar esta semana sólo se referían a los salarios mínimos de los jugadores, estando previstas otras reuniones entre el 15 y el 17 de septiembre para discutir las condiciones de trabajo. .

La temporada pasada, una huelga de árbitros interrumpió la primera semana del campeonato, antes de que la liga acordara aumentar sus tarifas de partido y el gobierno español prometiera contribuir a un fondo de pensiones para los árbitros.

Esta huelga de jugadoras se produce en un momento en el que el fútbol femenino español se encuentra en plena crisis, tras el beso forzado del ahora suspendido presidente de la Federación, Luis Rubiales, a la campeona del mundo Jenni Hermoso durante la ceremonia de entrega de medallas el pasado 20 de agosto. Hechos que causaron indignación internacional, y por los que el número 10 español acabó presentando una denuncia este miércoles.

Ochenta y un jugadores españoles se niegan a volver a jugar con La Roja hasta que cambie el liderazgo de la federación, lo que llevó al presidente interino de la Real Federación Española de Fútbol, ​​Pedro Rocha, a tomar medidas. «reestructuración».

Su primera decisión fue destituir al técnico Jorge Vilda, cercano a Rubiales cuyos métodos eran cuestionados por sus jugadores, y sustituirlo por su asistente Montse Tomé, que se convirtió en la primera mujer en ocupar este puesto.

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El mundo con AFP



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