Ofelia Artaud
El sábado estallaron escaramuzas durante una manifestación organizada contra la propuesta línea ferroviaria Lyon-Turín. El costo y las consecuencias ambientales están en el centro de las críticas. Invitado al Grand Rendez-vous, el presidente de Debout la France, Nicolas Dupont-Aignan, subraya que «debemos revisar este expediente que costará una fortuna».
Es un proyecto controvertido. El de la nueva línea ferroviaria Lyon-Turín, que debería permitir conectar las dos ciudades en menos de dos horas. El sábado, durante una manifestación contra este proyecto que reunió entre 3.000 y 5.000 personas cerca de Saint Rémy-de-Maurienne, en Saboya, estallaron rifirrafes entre los manifestantes y la policía. Los opositores señalan con el dedo en particular el costo y las consecuencias ambientales de tal proyecto. Invitado del Grand Rendez-vous d’Europe 1 / CNews / Les Échos, el diputado de Essonne y presidente de Debout la France, Nicolas Dupont-Aignan, volvió sobre las tensiones en torno a esta línea férrea, que representa según él «un colosal proyecto, que cuesta una fortuna y merece un debate».
«Tenemos que revisar este expediente que va a costar una fortuna, que el túnel actual no está completamente utilizado y que estamos en una situación en la que si fuéramos un país adulto, debatiríamos con calma las decenas de miles de millones que están en juego». ¿Metemos esos miles de millones ahí cuando no hay tráfico y no lo habrá por mucho tiempo?”, cuestiona el diputado de Essonne. «Podríamos tener un debate tranquilo sobre Lyon-Turín. ¿Los 10.000 millones, los 15.000 millones que hay allí no serían mejor utilizados en inversiones locales esenciales?»
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