Nuevas protestas masivas en Israel antes de la audiencia judicial sobre la reestructuración judicial prevista


Sólo en Tel Aviv, más de 118.000 personas participaron en una manifestación. Durante una manifestación en Tel Aviv, un hombre atropelló con un coche a un grupo que bloqueaba la carretera.

En Israel, unos días antes de una audiencia judicial crucial, hubo nuevamente manifestaciones masivas contra la reestructuración judicial planeada por el gobierno de Netanyahu.

Ilan Rosenberg/Reuters

(dpa)

Unos días antes del inicio de una audiencia judicial crucial, más de cien mil israelíes se manifestaron contra la controvertida reestructuración del poder judicial. Según los medios de comunicación, más de 118.000 personas participaron el sábado por la tarde en la manifestación central celebrada en Tel Aviv. Los organizadores cifran la cifra en 140.000. También hubo protestas en otros lugares de Israel. En los carteles se lee, por ejemplo: “El tribunal manda” o “Sin el Tribunal Supremo no hay democracia”.

Durante una manifestación en Tel Aviv a última hora de la tarde, un hombre atropelló con su coche a un grupo que bloqueaba la carretera. Según la policía, cinco personas resultaron levemente heridas. Posteriormente el conductor fue detenido. En el pasado se produjeron incidentes similares durante manifestaciones contra las políticas gubernamentales.

A finales de julio, como parte de una reestructuración del poder judicial muy controvertida, la coalición aprobó una ley que restringe las opciones de acción de la Corte Suprema. Los críticos clasifican este enfoque como una amenaza a la democracia de Israel. El gobierno argumenta que la Corte Suprema es demasiado poderosa e interfiere demasiado en cuestiones políticas.

El próximo martes, los 15 jueces del Tribunal Supremo quieren reunirse por primera vez para examinar las peticiones contra la nueva ley. Sin embargo, no estaba claro cuándo se podría esperar una decisión. Se espera que las discusiones duren varias semanas.

En la historia de Israel, la Corte Suprema nunca ha anulado una ley comparable. Si esto sucede ahora y el gobierno no acepta la decisión, el país enfrentará una crisis nacional.

El Primer Ministro Benjamín Netanyahu aún no ha declarado públicamente si acatará la decisión del tribunal. El miércoles compartió una publicación del presidente del Parlamento, Amir Ohana, en X, anteriormente Twitter, en la que Ohana sugería que el gobierno no aceptaría una derogación. La Knesset, el parlamento, “no tolerará que lo pisoteen”, escribió Ohana. El tribunal debe reconocer sus “límites de poder”.



Source link-58