Stephen King termina «La niebla» con David Drayton posiblemente escuchando civilización en la radio y diciéndole a su hijo las palabras: «Uno de ellos es Hartford, el otro es esperanza». King le dijo a Yahoo! Entertainment en 2017 cómo se sintió acerca de la visión radical y deprimente de Frank Darabont para el desenlace:
«Cuando Frank estaba interesado en ‘La Niebla’, una de las cosas en las que insistió fue que tendría algún tipo de final, que la historia no tiene, simplemente se desvanece en la nada, donde estas personas están atrapados en la niebla, y no tienen gasolina, y los monstruos están alrededor, y no sabes qué va a pasar después. Cuando Frank dijo que quería hacer el final que iba a hacer, yo estaba totalmente de acuerdo con eso».
En la película, Drayton, su hijo y otros amigos escapan del supermercado y se adentran en la siniestra niebla hasta que se quedan sin gasolina. En lugar de luchar contra los monstruos velados, toman la decisión desesperada de acabar con sus vidas. El único problema es que no tienen suficientes balas para todos en el auto.
La cámara de Darabont recorre sus rostros sombríos en tensos primeros planos mientras aceptan su grave elección. A continuación, corta a un plano general del coche en medio de la niebla mientras los disparos estallan en rápida sucesión. Cuando regresa al interior del auto, la vista de los cadáveres ensangrentados detrás del traumatizado Drayton es absolutamente escalofriante. Luego, en un cruel giro del destino, Drayton emerge del auto y encuentra que la niebla se despeja y los tanques militares vienen al rescate.