El anime original «Dororo» fue creado por el innovador de «Astro Boy» Osamu Tezuka en 1968, pero ese no es el tema del que estamos aquí para hablar hoy. En 2019, el manga original de Tezuka se adaptó a una nueva serie que aporta sensibilidades modernas a la ya inusual historia. Habla de Hyakkimaru, un joven ronin cuyas extremidades y varios órganos fueron sacrificados por su padre a 12 demonios cuando era un recién nacido. Como adulto, Hyakkimaru está equipado con prótesis y la capacidad de ver (y, por lo tanto, luchar) contra los demonios que se esconden en la Tierra. En el camino, conoce al joven Dororo, quien se convierte en su compañero de viaje, mientras busca recuperar las partes de su cuerpo perdidas de los demonios. Dororo no solo lo ayuda con las cosas del día a día debido a su discapacidad, sino que también se convierte en su atadura emocional para la humanidad, ya que se ve tentado a ceder ante la violencia que ha definido su vida. Como puede ver en la premisa, este es extremadamente oscuro, pero también es emocionalmente gratificante.
Eventualmente, Hyakkimaru debe enfrentarse a su malvado padre y luchar contra su hermano menor, quien se ha convertido en el heredero de su padre. Resulta que Dororo también tiene una historia familiar complicada y necesita la ayuda de Hyakkimaru al menos tanto como él necesita la de ella. Esta fantasía oscura va a algunos lugares bastante únicos con la premisa de «ronin errante», y vale la pena ver la versión 2019.