A la historia de Ivy le va mucho mejor que a la de Harley, principalmente porque se centra más en la propia Ivy que en las personas que la rodean. A lo largo de la temporada, la experiencia de Ivy en el mundo corporativo hace que se desvíe de su plan de usar su plataforma para hacer algo malo al convertirse en una celebridad apoyada por un poderoso equipo de relaciones públicas. Esto significa que Ivy está cada vez más ocupada, incapaz de pasar tiempo con Harley o incluso con sus aprendices, quienes están genuinamente inspirados por la forma en que Ivy combate el sexismo de Lex. Esta parte de la temporada es fascinante y bastante divertida, particularmente en todas las formas en que el programa posiciona a Lex Luthor como un suplente de Elon Musk.
«Harley Quinn» sobresale cuando hace pequeñas historias paralelas para personajes secundarios, pero sin convertirlos en grandes. Ver a Bane involucrado en una odisea italiana que tiene que ver con el fabricante de pasta que consiguió para la boda cancelada de Ivy es encantador y la mejor broma del programa. Joker continúa siendo un punto culminante, ya que pasa la temporada celoso de ser excluido de la sociedad de villanos ahora que es un padrastro suburbano y el alcalde de Gotham. También tenemos a King Shark en una historia paralela sobre convertirse en padre, lo cual es absolutamente fantástico.
Una gran adición esta temporada es Talia al Ghul como un personaje que, como Catwoman antes que ella, camina libremente tanto en el mundo del héroe como en el del villano. Ella es una gran adición a la historia de Ivy ya que los dos personajes se unen por ser mujeres en posiciones de liderazgo. Talia también actúa como contraste para Harley cuando se hace cargo de Wayne Enterprises y se mete con la Bat Family ahora que Bruce está en prisión.