Intel ha retrasado el lanzamiento de su procesador «Sapphire Rapids» escalable Xeon de cuarta generación varias veces sin revelar su razonamiento. La semana pasada, la compañía admitió que tuvo que cambiar Sapphire Rapids debido a un error de seguridad, pero parece que el problema es mayor de lo que dice Intel. De acuerdo a laboratorio de igorSapphire Rapids tenía alrededor de 500 errores que requerían que la empresa realizara 12 pasos para corregirlos.
El procesador Intel Xeon Scalable Sapphire Rapids de cuarta generación no solo aumentará el número de núcleos hasta 60, sino que también incorporará numerosas características nuevas, que incluyen Advanced Matrix Extensions (AMX), Data Streaming Accelerator (DSA), protocolo CXL 1.1, DDR5 y HBM2E. soporte de memoria, interfaz PCIe Gen 5 y mucho más. Pero la gran cantidad de características adicionales aumentan la probabilidad de errores de hardware, por lo que Intel tuvo que corregir casi 500 de ellos. laboratorio de igor informes.
Hasta ahora, Intel ha lanzado los pasos A0, A1, B0, C0, C1, C2, D0, E0, E2, E3, E4 y E5 del procesador Sapphire Rapids para corregir casi 500 errores. Dado que los procesadores modernos integran decenas de miles de millones de transistores, es inevitable que tengan una cierta cantidad de errores. Se llaman erratas y se mitigan con microcódigo o incluso con actualizaciones de software. Pero 500 erratas parece abrumador, al igual que 12 vueltas, considerando que una vuelta cuesta decenas de millones de dólares.
Si bien es costoso crear nuevos giros, el problema más apremiante es que Intel tiene que retrasar el lanzamiento de sus CPU de centro de datos de próxima generación. En este momento, Intel tiene como objetivo la ventana de lanzamiento de la semana 6 a la 9 (del 6 de febrero de 2023 al 3 de marzo de 2023) de 2023 para los procesadores Sapphire Rapids de alto volumen. Mientras tanto, algunos productos de SPR pueden lanzarse en la semana 42 del calendario de 2022 y la semana 45 del calendario de 2022.
Para Intel, el procesador Sapphire Rapids y la plataforma Eagle Stream son productos de vital importancia. No solo se espera que mejoren las posiciones competitivas de Intel en el mercado de centros de datos, sino que también abrirán las puertas a los productos de la próxima generación de la compañía: el procesador con nombre en código Emerald Rapids que saldrá en 2023.