Sergei Gerasimov todavía está en Kharkiv y continúa manteniendo su diario de guerra. Incluso si los ataques con cohetes han disminuido, el horror de la guerra con sus abismos psicológicos y situaciones absurdas sigue presente con urgencia.
Lada acribillado con balas rusas en Irpin, junio de 2022.
24 de mayo
Muchos están de acuerdo en que Putin está copiando a Hitler. Expresiones como «nación dividida», «repatriación de áreas históricas» o «traidor a la patria» podrían haber sido inventadas por los nazis y utilizadas mucho antes que Putin. Y la idea de que los rusos son una tribu aria es obviamente un plagio.
Algunos también creen que Putin también está tratando de imitar a Stalin y, de hecho, hay una serie de similitudes. Sin embargo, creo que imitar a Hitler y Stalin es solo una táctica utilizada por Putin. Estratégicamente, Putin emula a Mugabe y probablemente planea incluso superar a este dictador africano, que permaneció en el poder en Zimbabue hasta los 93 años. Este es el objetivo principal del gobierno de Putin, y todo lo demás que hace, como matar a cientos de miles de personas, es secundario a ese objetivo.
Pero Hitler, Stalin y Mugabe también creían que el valor de la vida de, digamos, cien mil personas es cero. En esto la mayoría de los dictadores están de acuerdo.
En general, todos los dictadores tienen muchas cosas en común. Por ejemplo, todos son estúpidos, incluso si algunos medios rusos nos hicieran creer que Stalin fue el hombre más inteligente y culto de todo el siglo XX. Si los dictadores de hoy fueran un poco más inteligentes, deberían haberse dado cuenta de que ni un solo dictador en el mundo ha vivido una vida feliz o incluso remotamente cómoda. Además, la tasa de mortalidad entre los dictadores, y no me refiero a la muerte natural, es tan alta que realmente deberías revisar la oferta de trabajo con cuidado.
Pero los dictadores son demasiado estúpidos para entender eso. La estupidez de un dictador proyecta una sombra antiintelectual en todo el país. Debido a que Putin es de muy baja estatura, las personas de su séquito pueden ser como mucho de la misma altura, o preferiblemente incluso más pequeñas. Asimismo, al tener una inteligencia muy media, elige para su entorno a personas de su misma inteligencia. Es aún mejor si son más tontos. Los que rodean a Putin, a su vez, eligen subordinados aún más estúpidos para ellos, y estos subordinados no dudan en hacer lo mismo a su vez.
«Hay personas en las que Dios vive; hay personas en las que habita el diablo; y hay personas en las que solo viven gusanos”, dijo la gran actriz rusa Faina Ranewskaya.
Toda dictadura necesita gente en la que los gusanos se sientan cómodos en gran número. Y aún mejor es cuando se juntan gusanos y sumisión.
Tuve que pensar en las palabras de Faina Ranevskaya cuando vi la foto de los sensores de imagen CCD disparados desde el observatorio en el pueblo de Grakovo. Los rusos, que ocuparon el pueblo a sesenta kilómetros de Kharkiv, sacaron estas matrices de los telescopios y las usaron como blancos para disparar.
Por supuesto, las matrices son adecuadas como dianas. Estos son cubos negros de tamaño mediano que las balas penetran o tocan. Estas son probablemente las partes electrónicas más valiosas de un observatorio, sin ellas los telescopios son inútiles.
¿Por qué los rusos se tomaron la molestia de desatornillar esos generadores de imágenes y usarlos como objetivos cuando bien podrían haber usado botellas de cerveza vacías para disparar? Incluso si los gusanos no están en las entrañas de estas personas, viven en sus almas.
Afortunadamente, los rusos fueron demasiado estúpidos para dañar también la óptica de los telescopios. Esta óptica es única, es mucho más cara que la electrónica y es muy fácil de romper.
Cuando estudiaba en la Universidad de Kharkiv, había una leyenda sobre un estudiante que logró arruinar la óptica de un gran telescopio. Este estudiante miró por el ocular y vio que la imagen estaba borrosa, por lo que decidió limpiar el ocular con un paño húmedo. Solo, esto dañó la óptica.
Antes de la guerra, a veces se permitía la entrada de periodistas al observatorio, pero bajo ninguna circunstancia se les permitía tocar los telescopios. Un movimiento descuidado y un daño irreparable está hecho.
Los rusos, en cambio, vivieron en el observatorio durante seis meses. Convirtieron el lugar en un basurero, como es su costumbre. Destrozaron todo lo que pudieron y usaron todo lo que no estaba clavado como objetivos para su «campo de tiro».
Y, sin embargo, fueron demasiado estúpidos para destruir la óptica de los telescopios.
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Sergei Gerasimov: ¿qué es la guerra?
De los diarios de guerra escritos después de la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero de 2022, los de Sergei Vladimirovich Gerasimov se encuentran entre los más inquietantes y conmovedores. Combinan el poder de observación y conocimiento de la naturaleza humana, la empatía y la imaginación, el sentido del absurdo y la inteligencia inquisitiva. Gerasimov nació en Kharkiv en 1964. Estudió psicología y más tarde escribió un libro de texto de psicología para escuelas y artículos científicos sobre la actividad cognitiva. Sus ambiciones literarias han sido hasta ahora la ciencia ficción y la poesía. Gerasimov y su esposa viven en el centro de Kharkiv en un apartamento en el tercer piso de un edificio de gran altura. La primera parte del diario ya está disponible como libro en DTV bajo el título «Feuerpanorama». Por supuesto, el autor no se queda sin material. – Aquí está la contribución 246 de la cuarta parte.
Traducido del inglés por Andreas Breitenstein.