Solo dale a Tracy Chapman todo el espectáculo

Los Grammy nos bendijeron por una vez. Por lo general, al comienzo del programa, nos estamos preparando para el desaire de proporciones de superestrella alienígena galáctica o una mezcla equivocada que deja el cerebro dando vueltas. En cambio, la Academia de la Grabación nos concedió un momento de paz para empezar la velada. Después de la presentación inaugural de Dua Lipa de sus temas recientes, la elusiva Tracy Chapman subió al escenario para interpretar su conmovedor sencillo “Fast Car” con el artista country de tiempo completo y el cantante de covers a tiempo parcial Luke Combs, quien está nominado por su versión de la canción. El decorado era simple: una línea de focos iluminaba a la pareja desde atrás, mientras que un campo borroso proporcionaba el telón de fondo. Chapman cantó el primer verso, con un tono claro y sin prisas, hasta que llegó el momento de que Combs dejara de alardear de su ídolo y cantara su parte. Y Taylor Swift y otras celebridades se pusieron de pie con reverencia y cantaron. Todo se sintió saludable y agradable, incluso si la fanfarronería de Combs pudo haberse interpuesto en sus armonías. Aún más loco que la calidad de la actuación fue el hecho de que los Grammy incluso lograron llevar a Chapman al escenario. La última vez que actuó en televisión fue hace nueve años y rara vez, o nunca, aparece en otras capacidades. Esperemos que la Academia de la Grabación pueda replicar estas vibraciones en el futuro, y con esto me refiero a convertirlo en un concierto de Tracy Chapman simplemente interrumpido por una entrega de premios.