Anthony Bourdain y «Parts Unknown» no solo me inspiraron a correr más riesgos, viajar más y probar más cocina internacional, sino que también me dieron una forma diferente de ver el mundo. Independientemente de en qué parte de este gran planeta azul termines, la gente allí tendrá una cultura e historias que vale la pena compartir. Dejé de pensar en alguien como «Otro» y comencé a pensar en lo que podríamos aprender unos de otros. Incluso aquellos que antes había considerado mis enemigos eran seres humanos con experiencias, alegrías y temores que reflejaban los míos, y darme cuenta de esto me ayudó a acercarme a ellos con más paciencia y disposición para escuchar. Si más personas fueran como Bourdain y se trataran con respeto y honestidad, el mundo sería un lugar mucho mejor.
La muerte por suicidio de Bourdain dejó un gran vacío en mi corazón y en los corazones de muchos de sus fanáticos en todo el mundo. Este hombre que entiende el valor de una buena charla, una bebida fría y un plato caliente de fideos se había ido para siempre, llevándose su sabiduría y calidez con él. Lo mejor que podemos hacer sin él es compartir las lecciones que nos trajo a todos, aprender más unos de otros y reaccionar con los brazos abiertos en lugar de sospechar. Te extraño, Tony, y donde sea que estés, espero que tengan fideos.
Si usted o alguien que conoce tiene pensamientos suicidas, llame a la Línea Nacional de Prevención del Suicidio llamando al 988 o llamando algramo 1-800-273-TALK (8255).