El expresidente Donald Trump escribió sus primeras publicaciones en sus cuentas de Facebook y YouTube restablecidas el viernes, más de dos años después de que fuera prohibido por la insurrección del Capitolio de los Estados Unidos.
«VOLVÍ», exclamó Trump, junto con un video de 12 segundos que parecía mostrarlo dando su discurso de victoria después de ganar las elecciones de 2016 diciendo: «Lamento haberlos hecho esperar, un asunto complicado».
El líder republicano de 76 años, que vuelve a postularse para presidente, no ha podido publicar ningún contenido para sus 34 millones de seguidores en Facebook y 2,6 millones de suscriptores de YouTube.
Las plataformas enviaron a Trump a la banca días después de la insurrección del 6 de enero de 2021, cuando una multitud de sus partidarios que buscaban detener la certificación de su derrota electoral ante Joe Biden asaltaron el Capitolio de los Estados Unidos en Washington.
Fue sancionado por publicar contenido que, según las plataformas, incitaba disturbios, y YouTube anunció su reincorporación el viernes, dos meses después de que Facebook dijera que estaba desbloqueando su cuenta.
La exestrella de la telerrealidad había pasado semanas afirmando falsamente que le habían robado las elecciones presidenciales, y posteriormente fue acusado por incitar a los disturbios.
“A partir de hoy, el canal de Donald J. Trump ya no está restringido y puede subir contenido nuevo”, dijo YouTube en un comunicado.
«Evaluamos cuidadosamente el riesgo continuo de violencia en el mundo real, mientras equilibramos la posibilidad de que los votantes escuchen por igual a los principales candidatos nacionales en el período previo a las elecciones».
– ¿Mantenerse fuera de Twitter? –
Los líderes republicanos se enfurecieron porque Trump fue expulsado de Facebook, mientras que un grupo de demócratas en el Congreso instó a la empresa matriz Meta a extender la prohibición para mantener el «contenido de negación electoral peligroso e infundado fuera de su plataforma».
El gigante de las redes sociales anunció en enero que restablecería las cuentas de Trump en Facebook e Instagram con «nuevas medidas de seguridad».
El abogado de Trump, Scott Gast, había escrito a la compañía, con sede en el Área de la Bahía de California, diciendo que había «distorsionado e inhibido drásticamente el discurso público».
La cuenta de Twitter del expresidente, que tiene 87 millones de seguidores, también fue bloqueada tras los disturbios, dejándolo comunicarse a través de su propia plataforma Truth Social, donde tiene menos de cinco millones de seguidores.
El nuevo propietario de Twitter, Elon Musk, reinstaló a Trump en noviembre pasado, días después de que Trump anunciara una nueva candidatura a la Casa Blanca, pero aún no ha publicado allí.
La Unión Estadounidense de Libertades Civiles, que ha presentado más de 400 acciones legales contra Trump, aplaudió la decisión de Meta.
“Nos guste o no, el presidente Trump es una de las principales figuras políticas del país y el público tiene un gran interés en escuchar su discurso”, dijo el director ejecutivo Anthony Romero en un comunicado.
“De hecho, algunas de las publicaciones más ofensivas de Trump en las redes sociales terminaron siendo evidencia crítica en las demandas presentadas contra él y su administración”.
Pero grupos de defensa como Media Matters for America se oponen con vehemencia a permitir que Trump explote el alcance de las redes sociales de los gigantes de Big Tech.
Media Matters acusó a Meta de «ignorar su continuo ‘riesgo para la seguridad pública’, que es el estándar que la compañía estableció para su regreso».
“La decisión de Meta es una luz verde para que Trump promueva contenido dañino en sus plataformas, y muestra que la compañía aún prioriza las ganancias y el apaciguamiento de las figuras de derecha sobre la seguridad pública”, agregó en un comunicado.
La impactante victoria de Trump en 2016 se atribuyó en parte a su influencia en las redes sociales y su enorme alcance digital.
Un comité del Congreso de EE. UU. recomendó en diciembre que fuera procesado por su papel en el asalto al Capitolio de EE. UU.
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