Seiscientos modelos de violines Stradivarius se enumeran en todo el mundo, y cada subasta del instrumento más famoso de la industria es un evento. El jueves 9 de junio salió así un ejemplar durante una subasta en Nueva York por 15,34 millones de dólares (14,5 millones de euros aproximadamente), cerca del récord, de 15,9 millones de dólares, para tal instrumento. El violín pertenecía a la colección Munetsugu, en Japón, y la casa Tarisio no dio ninguna indicación del comprador.
La copia, realizada en 1714 por el maestro Antonio Stradivari (1644-1737), había pertenecido durante casi cuarenta años al virtuoso ruso-estadounidense Toscha Seidel (1899-1962), quien la había tocado en la banda sonora de la mago de Oz (1939), un clásico de Hollywood.
“Seidel también fue maestro de Albert Einstein. Así que este violín terminó junto al gran científico matemático mientras tocaban cuartetos en la casa de Albert en Princeton, Nueva Jersey».declaró el viernes a la Agence France-Presse (AFP), Jason Price, fundador y director de Tarisio, en las instalaciones de la empresa especializada en la venta de instrumentos raros.
Toscha Seidel, que había emigrado a los Estados Unidos en la década de 1930, y Albert Einstein, que había huido del régimen nazi, habían participado en un concierto en Nueva York en 1933 para apoyar a los científicos judíos alemanes que abandonaban su país.
El periodo dorado situado entre 1710 y 1720
De los mil instrumentos hechos por el luthier de Cremona, “muchos están en museos, otros en fundaciones, y no se van a vender. De los que han sobrevivido, hay unos pocos que se conocen como los ejemplos de la época dorada, que es aproximadamente entre 1710 y 1720. Y estos son, en su mayoría, los más deseados y los más apreciados»explica Jason Price.
El récord en una subasta se remonta a 2011, cuando un Stradivarius bautizado como «Lady Blunt», por haber pertenecido a Lady Anne Blunt, nieta del poeta Lord Byron, fue vendido por 15,89 millones de dólares en Londres.
En 2014, otro ejemplar, cuyo precio mínimo se había fijado en 45 millones de dólares, no había encontrado comprador en Sotheby’s.