El telescopio espacial Hubble y el telescopio espacial James Webb son herramientas poderosas para observar el cosmos, pero la forma en que ven el universo es bastante diferente. Mientras que Hubble mira principalmente en la longitud de onda de luz visible en el mismo rango que el ojo humano, Webb mira en el rango infrarrojo que está más allá de la visión humana. Mirar el mismo objeto en diferentes longitudes de onda revela diferentes características, como lo demuestra un par de imágenes publicadas recientemente.
Webb y Hubble tomaron imágenes de la galaxia espiral IC 5332, ubicada a más de 29 millones de años luz de distancia. Aunque esta galaxia tiene solo un tercio del tamaño de la Vía Láctea, es un gran objetivo para la astronomía porque la espiral está casi perfectamente de frente desde nuestro punto de vista. La imagen capturada por el instrumento MIRI ultrafrío de Webb muestra la estructura similar a un esqueleto de los brazos espirales de la galaxia.
Compare esta imagen con una imagen tomada por Hubble, que muestra el polvo como manchas oscuras que bloquean la luz a través de los brazos espirales.
En el sitio web de ESA Webb hay un control deslizante que le permite comparar las dos imágenes directamente y ver las similitudes y diferencias que observan al mirar la misma galaxia.
La razón por la que la galaxia se ve tan diferente en luz visible e infrarroja tiene que ver con el polvo que se esparce por ella, como explica la Agencia Espacial Europea: “La luz ultravioleta y la luz visible son mucho más propensas a ser dispersadas por el polvo interestelar que la luz infrarroja. Por lo tanto, las regiones polvorientas se pueden identificar fácilmente en la imagen del Hubble como las regiones más oscuras por las que gran parte de la luz ultravioleta y visible de la galaxia no ha podido viajar. Sin embargo, esas mismas regiones polvorientas ya no están oscuras en la imagen de Webb, ya que la luz del infrarrojo medio de la galaxia ha podido atravesarlas”.
Recomendaciones de los editores