Se trata de una reforma que pretende simplificar la organización del partido, considerada compleja y opaca. Del viernes 15 al lunes 18 de marzo, los activistas de Europe Ecologie-Les Verts (EELV) están invitados a votar una reforma de los estatutos del partido, que prevé, en particular, eliminar las mociones que no favorecen la conquista interna del poder. El resultado de la votación se anunciará el martes por la mañana durante una conferencia de prensa. Para ser validada, esta reforma debe ser aprobada por el 66% de los votantes.
Las luchas internas y los debates opacos del Partido Verde, debido a la presencia de mociones de diferentes sensibilidades del partido, han sido a menudo objeto de burla. Según los nuevos estatutos, sólo habría una única moción al momento del congreso, con aportes por enmiendas. Entre los otros cambios propuestos, el secretario nacional sería elegido por mayoría uninominal en dos vueltas y ya no sería designado por los representantes electos de las distintas mociones. La secretaría ejecutiva estaría agrupada en torno a seis personas, elegidas por mayoría de votos o por aprobación (elección del consejo federal).
Esta reforma de los estatutos se inscribe en los estados generales de la ecología, lanzados en febrero de 2023 por la secretaria nacional del partido, Marine Tondelier, y que desembocaron en octubre en el lanzamiento de un movimiento más amplio denominado “Los Ecologistas”. Un primer paso que pretende abrir el camino a una profunda transformación del partido, y cuya marca pretende, en última instancia, sustituir el nombre del partido.
Preocupaciones internas
Internamente se alzaron voces para pedir que se pospusiera la votación, argumentando que se había dado poco tiempo para poder examinar en detalle estos nuevos estatutos. Algunos también han notado que “El pluralismo interno se verá dificultado por las nuevas normas”, cuando otros estaban preocupados por el nuevo método de designación del secretario nacional, similar según ellos a “un plebiscito”contrariamente a “valores y principios que pensamos aplicar si llegamos al poder”.
Además, el secretario nacional aún no podrá ser parlamentario ni alcalde, según estos nuevos estatutos, “lo que siempre plantea un problema de encarnación” por algunos.