Villany.
Foto: Myung J. Chun/Los Angeles Times vía Getty Images
La locura descendió sobre el Dolby Theatre de Los Ángeles el 10 de marzo, cuando todos los mejores y más brillantes de Gotham fueron mantenidos cautivos en un lugar discreto en el que se infiltraron dos de los villanos más notorios jamás vistos en toda la galería de pícaros. Traducción: Arnold Schwarzenegger y Danny DeVito, quienes interpretaron a Mr. Freeze y The Penguin en Batman y Robin y Batman Regresa, respectivamente, subieron al escenario para presentar el Premio de la Academia a los Mejores Efectos Visuales.
Con los dos íconos del cine reunidos uno al lado del otro en un encantador contraste de alturas en el escenario, este dúo de presentadores trabajó en múltiples niveles: por un lado, este fue un Mellizos (1988) reunión. En otro nivel, pudieron compadecerse de que Batman les entregara sus respectivos traseros: Schwarzenegger al usar su debilidad (amor) en su contra, DeVito al ser arrojado por una maldita ventana. Se habrían salido con la suya con un equipo de villanos impecable, si no fuera por ese molesto Batman, Michael Keaton, sentado entre la audiencia. Cuando Schwarzenegger dijo: «Tienen mucho valor para mostrar su cara por aquí», Keaton les dio una mirada de mal gusto y una especie de gesto de «venid a buscarlo».
Así que esta noche no fue sólo una gran noche para Christopher Nolan, sino también vengativa para la obra de Batman anterior a Nolan.