Boeing está comenzando a superar uno de sus mayores obstáculos en la memoria reciente. CNBC señala que el fabricante de aviones entregó su primer 787 Dreamliner en más de un año, suministrando a American Airlines uno de los nueve vehículos que espera recibir en 2022. Boeing detuvo la fabricación en mayo de 2021 mientras la Administración Federal de Aviación revisaba cómo la compañía inspeccionaba los aviones después una serie de problemas de fabricación.
La empresa tuvo que detener las entregas varias veces en menos de un año después de detectar problemas de producción potencialmente peligrosos, como el espacio del fuselaje. La FAA solo autorizó a Boeing a reanudar las entregas el lunes. Las entregas de Dreamliner han estado en suspenso durante la mayor parte de los últimos dos años entre los defectos de fabricación y una pandemia que frenó drásticamente los vuelos de pasajeros.
Existe un fuerte incentivo para poner el 787 Dreamliner en manos de los clientes. Las fallas y los consiguientes recortes de producción le costarán a Boeing $ 5.5 mil millones, y eso se suma a los problemas graves del 737 Max que provocaron accidentes que mataron a 346 personas. Boeing tiene una reputación empañada, y estas entregas podrían ayudarlo (lentamente) a reparar su imagen mientras capitaliza una reactivación de los viajes aéreos.
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