Una empresa rusa que ofrece servicios de procesamiento de datos para aplicaciones ha engañado a muchas empresas internacionales al presentarse como una entidad estadounidense. La empresa se llama Pushwoosh Inc., y Reuters descubrió sus orígenes rusos.(Se abre en una nueva ventana).
Una revisión rápida de los canales de redes sociales de Pushwoosh revela una empresa que dice estar ubicada en Washington, DC en Twitter y Maryland en Facebook y LinkedIn. En el canal de YouTube de la empresa, cuenta con 80 000 clientes, incluidos Unilever, Deloitte, Coca-Cola, McDonald’s, FIBA, Sport1 y SPAR.
Las presentaciones regulatorias de EE. UU. de la compañía no mencionan a Rusia, esto incluye ocho presentaciones anuales realizadas en Delaware. También se ha confirmado que el fundador de Pushwoosh, Max Konev, está usando la dirección de correo electrónico de un amigo con sede en Maryland para manejar la correspondencia comercial.
En realidad, Pushwoosh es una empresa rusa con sede en Novosibirsk, Siberia. Emplea a unas 40 personas y los ingresos el año pasado ascendieron a aproximadamente $ 2,4 millones. También está registrado para pagar impuestos al gobierno ruso y, por lo tanto, está sujeto a las mismas reglas que otras empresas rusas, en particular, el intercambio de datos de usuario con el gobierno ruso a pedido.
Lo más preocupante de todo es la asociación de la empresa con agencias del gobierno estadounidense. Una aplicación del Ejército de EE. UU. utilizada como portal de información en el Centro Nacional de Entrenamiento por las tropas contenía el código Pushwoosh, pero fue eliminada debido a «problemas de seguridad» a principios de este año. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) admitieron que pensaban que Pushwoosh era una empresa estadounidense y ahora han eliminado el código de la empresa de varias aplicaciones públicas. Otros, incluidos la UEFA y Unilever, confiaron en terceros para crear aplicaciones para ellos que terminaron conteniendo el código Pushwoosh.
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Los expertos legales que hablaron con Reuters creen que Pushwoosh podría estar violando las leyes de la FTC y este descubrimiento puede desencadenar sanciones. Eso tendría un gran impacto no solo en la empresa, sino también en las 8,000 aplicaciones en las que su código está integrado en Google Play y iOS App Store.
Konev afirma que su empresa «no tiene conexión con el gobierno ruso de ningún tipo» y que todos los datos se almacenan en EE. UU. o Alemania. Actualmente no hay evidencia clara de que los datos almacenados se compartan con Rusia, pero eso no significa que su gobierno no pueda obligar a Pushwoosh a compartirlos.
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